El alcalde de Sant Josep, Josep Marí Ribas, ´Agustinet´, aseguró ayer en la presentación del nuevo material expositivo del centro de interpretación de ses Salines que el derribo del viejo delfinario ha sido «siempre una aspiración» de su gobierno, aunque no se ha avanzado en ello. «Tenemos ganas de volver a tratar este asunto», dijo el acalde, que recordó que se trata de un espacio «muy degradado» en pleno Parque Natural. La instalación, que es privada, se levantó con una licencia de obra, pero nunca se dio permiso de actividad, por lo que, resaltó Marí Ribas, «no se puede hacer nada». Al ser preguntado sobre la posibilidad de expropiar el delfinario, el alcalde dijo que «se puede plantear», aunque al mismo tiempo destacó que es «una medida forzosa» y que se tiene que «justificar». «No es tan sencillo hacerlo», avisó.

Por su parte, el presidente, Vicent Torres, indicó que debe ser el Govern el que tome la iniciativa de limitar el acceso de vehículos privados al Parque Natural y eludió pronunciarse sobre si su gobierno tiene la voluntad política de poner en marcha una acción de este tipo. «Tenemos mucho que decir cuando se quiera hacer», se limitó a decir.