Sant Josep | Alicia Zunzunegui

Samir pasa cada verano un mes de vacaciones en Eivissa desde hace 38 años. Por negocios, tiene que viajar ahora a Estocolmo pero, una vez solventados sus compromisos, volverá a la isla para seguir con sus vacaciones. Samir suele invitar a su novia, una modelo austríaca, y a sus amigos a su casa en Jesús. Les invita a dormir en su casa, les alquila coches, los lleva de fiesta, les paga la bebida y lo que haga falta. Cada día, Samir va con su novia a comprar ropa de marca en una tienda del puerto, ya que ella sólo viste ropa de marca. Casi todos los días Samir está en el VIP de El Divino con sus botellas de cava que, aunque él no beba mucho, compra para todos sus amigos. Algún día, también se deja caer por Pachá, aunque con menos frecuencia. Para Samir, los cambios que se están produciendo en Eivissa, como el cierre de los afters, van a perjudicar a la isla.

-¿Por qué ha escogido Eivissa para venir de vacaciones?

-Porque hay mucha libertad y porque me encanta la discoteca El Divino. También por sus paisajes y sus playas, que para mí son las mejores de Europa.

-¿Qué ha hecho estas vacaciones que pensaba que nunca haría?

-Eivissa no es un sitio normal. Siempre que vengo aprovecho para hacer cosas que no puedo hacer en otros sitios.

-¿Qué es lo más bestia que ha visto o que ha hecho?

-Lo más fuerte que he visto es una chica que iba por la calle enseñando medio culo. Yo estaba sentado con mi novia en un bar y rápidamente me levanté para hacerle una foto. Mi novia se enfadó un poco (ríe). Me impresionó porque en otros lugares, por hacer eso, te pueden detener por exhibicionismo.

-¿Cómo les dirá a sus amigos que es Eivissa después de esta visita?

-Les diré que la isla está cambiando. Por ejemplo, ya no hay afters. Si el gobierno sigue por este camino no vendrá gente a Eivissa. La gente viene aquí porque este es un sitio loco. Estos cambios no son buenos para la isla.

-¿Qué es lo peor que le ha pasado en la isla?

-Me han robado en casa dos veces. Se llevaron relojes, joyas, dinero... y lo peor es que la policía no hizo nada.

-¿Qué le ha dejado con la boca abierta?

-Dos chicas que vi en ses Salines masajeándose, dos chicos que se iban tocando el culo mútuamente mientras paseaban por la calle, las gogos de El Divino, la gente volviendose loca en Pachá y muchas cosas más.

-¿Qué ha comprado para regalar a sus amigos y familiares?

-Souvenirs de Pachá y El Divino y ropa de marca para su novia.

-La visita más cultural ha sido...

-Ninguna.

-¿Qué platos típicos ha probado?

-Fui a cenar a un vasco y, la última vez que vine, me llevé diez ensaimadas para Dubai.

-¿A cuántas playas ha ido?

-A muchas. La gracia es ir cambiando. He estado en Cala Tarida, Cala Llonga, ses Salines...

-Lo más feo de Eivissa es...

-Los gitanos.

-Los precios son...

-Elevados. Y si a mí, que tengo dinero, me parecen elevados, debe de ser horrible para la gente más pobre... Los precios ya son igual de altos aquí que en Mónaco o en Saint Tropez.

-Y el servicio en los establecimientos...

-En los que yo frecuento el servicio es bueno porque lo pagas, pero en general no creo que el servicio sea muy bueno.

-¿Cree que hay demasiados turistas?

-Creo que este año hay menos que otros años por las mismas fechas. También es cierto que Eivissa atrae a un tipo de público determinado.

-¿Volverá?

-Seguro.