La jugadora ibicenca Ana Ferrer se ha convertido en pieza casi indispensable del Balonmano Alcobendas de la División de Honor femenina. En su tercera temporada en el conjunto madrileño y con solo 20 años, la balonmanista pitiusa se ha consolidado como una de las titulares del equipo. De los once partidos ligueros jugados, ella ha disputado diez y solo se perdió uno por culpa de una lesión.

Ferrer es modesta y no opina que sea una jugadora importante de la plantilla sino una más. Se limita a decir que desde que llegó al Alcobendas está «aprendiendo mucho» y creciendo deportivamente.

Después de dos temporadas obteniendo la permanencia con una escuadra muy joven, esta campaña el objetivo sigue siendo mantenerse, pero antes intentarán clasificarse para disputar la Copa de la Reina, a la que irán los siete mejor clasificados tras acabarse la primera vuelta. Actualmente las madrileñas son novenas, con dos puntos menos que el BM Mónovar –séptimo–, con el que tropezaron el pasado fin de semana por 27-30.

La primera vuelta, casi lista

Cuando restan dos jornadas para cerrar la primera vuelta, Ferrer reconoce que «será complicado» que el Alcobendas se clasifique, pero no arroja la toalla: «El último partido ante Monóvar era muy importante y perdimos. Si ganamos los dos que nos quedan, tendremos opciones». En la próxima jornada Alcobendas se medirá al Elche-Mustang –quinto clasificado– y al BM Castro-Urdiales –octavo–.

Esta campaña ha sido de cambios para Ferrer, que ha pasado de jugar de central a hacerlo de extremo izquierda, posición en la que está «empezando a ver los resultados».

La ibicenca aseguró que los problemas económicos que están afectando a su club solo le han pasado factura al equipo masculino de la Liga Asobal y que en ningún momento ha pensado marcharse: «Estoy muy a gusto aquí», sentenció.

29 goles

Son los que ha marcado la jugadora ibicenca en los diez partidos que ha disputado. Ocho de ellos en el último encuentro frente al Monóvar.