Hacía años que no se vivía en Vara de Rey un Sant Jordi tan animado como el del sábado. Que el 23 de abril coincidiera en sábado y con un tiempo casi veraniego, echó una mano a los libreros y a los escritores.
La letras ibicencas brillaron al sol y, entre las novedades, los libreros coincidieron en que los más vendidos fueron ´La Segona República a Ibiza i Formentera´ de Neus Escandell y Antonio Viñarás, ´Ibiza: la destrucción del paraíso´ de Joan Lluís Ferrer y ´Sa Penya Blues´, de Cristina Amanda Tur. Los libreros también citaron a Ben Clark con ´Los últimos perros de Shackleton´ y ´Captius i senyors de captius a Ibiza´, de Antoni Ferrer Abárzuza. «Este año es más difícil destacar uno en concreto porque han salido muchísimas novedades locales y las ventas están más repartidas», explicaba la librera Paqui Torres de Vara de Rey.
Por su parte, Julia Navarro, con ´Historia de un canalla´, y Santiago Posteguillo, con ´La legión perdida', acapararon las ventas de autores nacionales en Hipérbole, aunque, como resumió el librero Pedro González, durante la jornada se fue vendiendo «de todo y todo tipo de géneros: desde novela negra a clásicos como Cervantes», un escritor que en el 400 aniversario de su muerte hizo acto de presencia en Vara de Rey gracias a la representación teatral de la compañía Es Devessai que también reencarnó a Alan Poe, Dostoyevski y Shakespeare. Los cuatro escritores animaron a los asistentes a leer sus obras y no pocos se sacaron fotos con ellos, incluido el alcalde, Rafa Ruiz.
Lourdes Riera, librera de Vara de Rey, coincidía en citar a Posteguillo entre los más vendidos, además de ´Cinco esquinas´, de Mario Vargas Llosa y ´Olvidé decirte quiero´, Mónica Carrillo, además de todas la saga de Elísabet Benavent.
Los editores
Si alguien tenía motivos para sonreír en Vara de Rey eran los editores ibicencos, que comprobaban el buen ritmo de ventas de la jornada, mucho mayor que en ediciones anteriores.
Es el caso de Ramon Mayol, de Edicions Aïllades, que a mediodía apuntaba que su escritor bestseller del día era Joan Buades con su novela ´Crui. Els portadors de la torxa´ que justo en esos momentos firmaba en la carpa habilitada por el Ayuntamiento. «Este año hay más gente pero sobre todo más gente que viene a comprar libros, que realmente está interesada en leer», subrayaba Mayol, que instaló su propio puesto en el paseo.
También estaba al frente de su propia parada Neus Escandell, editora de Balàfia Postals, que destacaba entre sus criaturas las excelentes ventas de Joan Lluís Ferrer y su isla destruida, así como de Cristina Amanda Tur, «tanto la novedad de este año como sus libros anteriores».
«Es bastante evidente que hay más gente que el año pasado y estamos vendiendo muy bien. Es un día esperado y muy bonito», subrayaba la editora, contenta además por la buena salida de su libro con Viñarás sobre la II República.
Miquel Costa, de Edicions Mediterrània, indicaba que el libro con mejor acogida de su producción reciente ha sido ´Viatges a Ibiza´ de Pere Català i Roca con textos de Vicent Marí Costa, «pero también han recibido muy buena acogida ´Sonar sa flaüta´ de Josep Cardona Serapio y ´Na Lea i es barruguet´ de Margalida Torres con ilustraciones de Marc Roig». «No todas las novedades que sacas cada año tienen el mismo interés para el público, pero este año lo que hemos sacado han tenido una buena acogida. Sant Jordi es un día feliz, un día de fiesta», celebraba Costa.
Los lectores
Las lectoras Laura Marí y Maite Alvite siguieron las recomendaciones de su librero de cabecera, Pedro González de Hipérbole. Marí se llevó a casa ´Ciudad en llamas´ la primera novela de Garth Risk Hallberg, considerado ya el nuevo clásico de las letras norteamericanas, mientras que Alvite hizo lo propio con ´El camino estrecho al norte profundo´, de Richard Flanagan.
Alfonso Molina, primer teniente de alcalde de Vila, dejaba por las nubes a los políticos de Ibiza mostrando una bolsa llena de tochos recién comprados: nada menos que tres sesudos ensayos (´El universo como obra de arte´, ´Agujeros negros y tiempo curvo´ y ´Grandes generales del ejército romano´), un libro de divulgación de Oliver Sacks y una novela de Emmanuel Carrère. Ahí es nada.
Los ´otros´ libros
En Vara de Rey hubo sitio también para libros que editan instituciones, los que venden las ONG para recaudar fondos o los que se editan por motivos que van más allá de la literatura.
En el primer grupo está el Institut d´Estudis Eivissencs, que vela por editar y reeditar títulos que forman parte de las raíces culturales de la isla.
Una de las novedades que mejor aceptaron os lectores fue precisamente la reedición de ´L'any en estampes´ de Marià Villangómez, «en el que han trabajado el equipo de correctores y colaboradores habituales de Villangómez: Fina Matutes, Joan Cardona Joan des Pou, Pep Marí y Toni Ferrer Abárzuza, que coordinó la reedición», explicaba la gestora cultural del IEE, Marga Serra. «Es un libro que pensamos que tiene que estar siempre disponible», apuntaba.
Además, por tercer año consecutivo el IEE vendió a buen ritmo ´Les principals plantes per a la salut d´Ibiza i Formentera´, de Josep Colonques, todo un longseller.
En el segundo grupo, el de ONGs y asociaciones, se cuentan AECC, Deforsam, Cáritas, Deixalles, Affac, Manos Unidas o Magna Pitiusa, que instalaron también puestos de venta de libros de segunda mano a muy buen precio para financiar sus terapias y actividades. «¡Son donaciones y cuestan solo uno cincuenta!», decía Pepe Alba, acompañado por Isaac Romero, ambos usuarios de Magna Pitiusa.
Y entre los que se editan por razones que van más allá de la literatura estaba ´Mi mamá de día´, de las autoras Rebeca Hidalgo (texto) y Irene Jaumà (ilustraciones) que es todo un homenaje al trabajo de la educadora infantil Sandra Vericat en el espacio libre de aprendizaje Can Rareta.
Surgió como un regalo a Vericat por parte de las madres y padres que aprecian su trabajo y ha acabado convirtiéndose en un homenaje y también una reivindicación de este tipo de educación «más natural, en la que se les deja ser niños. Queremos que todo el mundo sepa que existen otras alternativas», explicaba Hidalgo sobre su trabajo.
Además, y por primera vez, la Escola d´Adults y el Ayuntamiento de Vila organizaron una muestra microrrelatos de los alumnos del centro no catalanoparlantes, que han escrito sus textos en ruso, polaco, árabe, wolof (Senegal) o quechua y que se han publicado en ediciones bilingües traducidas al catalán.
El Consistorio también instaló su propia parada con sus ediciones. «Se han vendido sobre todo los libros de fotografías de Portmany y ´Postals antigues´», explicaba Irene Marí, una de las personas que atendía el puesto, «muy contenta del ambientazo de este año», que en su zona era todavía mayor durante el multitudinario cuentacuentos de David i Monma.
Los autores locales que firmaron, además de los ya citados, fueron Virginia Picorelli, Helena Ribas, Chryssula Kokossulis, Carolina Riera, Dali Sorrentino, Joaquim Seguí, Carles Fabregat, José Miguel Romero, Bartomeu Ribes, Lluís Ferrer, Toni Roca, Margalida Torres, Carles Torres, Antoni Tur Torres, Nora Albert, Josep Cardona Serapio, Lluís Ruiz Val, Marià Torres Torres, Siegfried Meir, Bernat Ribas Planells, Agnés Vidal y Álex Garrido.
