Vox logra retener el único escaño que tenía en el Parlamento Vasco por la provincia de Álava. El partido de Santiago Abascal corta su crisis electoral y continúa teniendo representación parlamentaria en Euskadi tras las elecciones de este 21 de abril. Un hecho nada desdeñable teniendo en cuenta que todo apuntaba a que continuaría la debacle electoral que comenzó en Galicia el pasado mes de febrero. La ultraderecha resiste así en un lugar particularmente difícil con la misma candidata, Amaia Martínez. Además, en votos también logra superar el 2%, cuando hace cuatro años se quedó en el 1,9%. El propio Abascal viajó a Vitoria este domingo para hacer el seguimiento de la noche electoral, lo que apuntaba a que en su partido al menos sí confiaban en resistir.