La nueva jornada laboral de 37,5 horas semanales pactada por el PSOE y Sumar es uno de los puntos más espinosos en el acuerdo de coalición para formar gobierno. Esta medida, que solo entrará en vigor si Pedro Sánchez reúne los apoyos necesarios para formar gobierno, ha sido sorprendente para todos porque es un cambio que nadie se esperaba. La reducción no repercutirá en el salario de los trabajadores, sin embargo, hará que aumente.

Se calcula que el nuevo horario beneficiará a más de 12 millones de personas del sector privado que aún tiene que trabajar 40 horas a la semana. Un 16,7% de los empleados privados ya disfrutan de una jornada de 37,5 horas o inferior. La propuesta se llevaría a cabo de manera progresiva. En 2024 se propondrá una jornada máxima de 38,5 horas, y en 2025 se consolidaría en las 37,5 horas semanales. Los afectados tendrán un recorte de 150 horas semanales pasando de las 1.950 actuales a las 1.800 al año que proponen ambos partidos.