Cuidar de las plantas es una de las tareas más agradables del hogar. Aún así, hay veces en las que nos falta el tiempo para dedicarles los cuidados que necesitan. Si eres de esas personas a las que les encanta tener plantas en casa pero no eres bueno cuidándolas, te recomendamos las más resistentes y fáciles de mantener que pueden colocarse en el interior del hogar. Además, también son capaces de oxigenar el ambiente, relajarnos y hacernos sentir más felices gracias a su aroma.
Hoy en día, podemos hacernos con cualquier tipo de planta de interior en cualquier época del año gracias a los invernaderos. No obstante, a la hora de llevarte la planta a casa debes tener muy claro dónde la vas a ubicar.
Ficus
El hábitat natural del ficus son los bosques tropicales, por eso da tanta sensación de frescura y naturaleza. Tiene las ramas muy grandes y arqueadas, con hojas puntiagudas. Si tienes techos altos, pueden alcanzar una altura máxima de 3 metros, aunque también hay variedades pequeñas que no llegan al metro. Es una muy buena planta para elegir ya que mejora en gran medida la calidad del aire en los interiores porque que absorbe tóxicos y los neutraliza.
Para cuidarla debes elegir una tierra que drene rápidamente y es mejor que, cuando la riegues, sea con agua filtrada o de botella. Ponla en un lugar donde le de bien el sol, o al menos que no esté la mayor parte del día con sombra. En invierno deberás regarla cada 15 días y en verano más a menudo, cada semana.
Planta elefante
Es una planta de interior muy alta que puede llegar a medir un metro y medio, aunque llega hasta los 10 metros en su hábitat natural. Se caracteriza por tener un tronco muy grueso, parecido a una pata de elefante. Es necesario que tenga una base de tierra que drene bien porque tienen tendencia a retener agua. Es recomendable ponerla en el lugar más soleado de la casa pero, en verano, podría ser perjudicial, así que ponla en un sitio donde haya sombra parcial. Riégala cada 7 o 14 días para mantenerla, sobre todo en temporada de crecimiento. Si tiene el sustrato seco será que tienes que darle un riego.
Cactus
Los cactus pertenecen a la familia de las suculentas y son plantas que acumulan agua para adaptarse al hábitat en el que se desarrollan, transformando sus hojas en espinas para protegerse de los animales y prevenir, también, la pérdida de agua. Debes regalarla cada 10 o 12 días en primavera y otoño y aumentar la frecuencia en verano, cada 4 u 8 días. Cuando llegue el invierno podrás suprimir el riego casi al completo ya que entran en hibernación en los meses más fríos. Por eso es mejor dejarlo en el balcón, porque si está en un ambiente con una temperatura superior a los 20º no entrará en reposo. Asimismo, tampoco sobrevivirá si las temperaturas son inferiores a 7ºC.
Espatifilo
Conocido como lirio de paz, es una de las mejores planas depuradoras de aire. Es muy fácil de cuidar porque se adapta a cualquier entorno. Lo mejor es ponerle en un lugar donde la luz del sol llegue tamizada y que no sea directa. Riégala cuando veas que las hojas apuntan hacia abajo o cuando la tierra esáé seca y procura darle agua embotellada o filtrada.
No es recomendable si tienes gatos o perros ya que es tóxica para ellos.
Calathea
Esta planta destaca por sus colores verde azulado en la parte superior de sus hojas mientras que en envés es violeta. Además, se enrollan por la noche y se desdoblan durante el día. Necesitan una exposición a la luz moderada, sin sol directo y les gusta la humedad. Debes regarla dos veces por semana en verano y una en invierno pero evita mojar las hojas.
