Adaptarse de nuevo a la rutina no es tarea fácil. Pero, ¿cómo afrontarla con optimismo? A continuación, algunas recomendaciones para que el regreso a las aulas se conviertan en una aventura positiva e ilusionante.
No a los comentarios negativos.
Es de vital importancia no usar comentarios negativos, de desilusión y recordarles los resultados positivos del curso anterior
Hacerlos partícipes al elegir la ropa y el material escolar.
Como todos, estrenar ropa o materiales siempre satisface por lo que, siempre bajo el control y la escucha activa, dejarlos que elijan el color de su mochila o de los materiales.
Una buena comunicación.
Con la llegada del nuevo curso es normal que los niños se muestren más nerviosos. Es bueno explicarles cómo va a ser el nuevo curso, qué asignaturas tendrán y las actividades que van a realizar
El reencuentro previo, una buena opción.
Reencontrarse con alguno de sus compañeros o amigos días antes del inicio del curso puede ser una buena opción para «romper el hielo».