Las Pitiusas acabaron el mes de abril con un total de 11.080 personas sin empleo, 1.012 más que en el mismo mes de 2020, cuando comenzó la pandemia. Pero peor aún es la comparación con el periodo precovid: hay 5.730 desempleados más que en abril de 2019, un 107% más que entonces. Es decir, más del doble.
Por islas, Ibiza tiene 10.638 desempleados, 927 más que hace un año (+9,5%), mientras que en Formentera hay 442, que son 85 más que un año atrás (+22,8%). La buena noticia es que se ha reducido el paro intermensual: respecto a marzo hay 312 menos en Ibiza (sobre todo del sector de la hostelería) y 45 menos en Formentera. En Mallorca el incremento del paro ha sido del 15,3% interanual (acumulan allí 65.707 parados) y en Menorca, del 4,6%.
Hay otro indicador que da alas al optimismo, el de las contrataciones. En Ibiza se firmaron 3.060 contratos, 1.475 más que hace un año (+93%), y en Formentera 250, 180 más (+257%), coincidiendo con la apertura (con enormes restricciones) de bares y restaurantes, la llamada al trabajo de los hoteles que empiezan a preparar la temporada y la Semana Santa. En Ibiza, el sector de la hostelería es el más beneficiado, con incrementos del 103%, seguido del comercio (+97%). El aumento de la contratación en Mallorca fue del 137,5%; en Menorca, del 228,3%.
Eso sí, si se compara con los datos de 2019, más que de optimismo habría que hablar de pesadilla laboral: las contrataciones actuales son una tercera parte de las que había un año antes de que empezaran los contagios y se paralizara la economía: entonces se firmaron 9.452.
El conseller de Modelo Económico, Turismo y Trabajo de Balears, Iago Negueruela, presentó ayer los datos de afiliación y paro y señaló que, a pesar de las dificultades que continúa habiendo debido a la pandemia y a las medidas adoptadas para hacer frente al covid, la recuperación económica y del mercado laboral «es progresiva». Negueruela reconoció que son datos todavía «duros», si bien indicó que las islas se encuentran «en un marco de recuperación» y que si se suman los 4.500 trabajadores salidos de los ERTE en este mes de abril (587 en las Pitiusas), «ya se han incorporado a su trabajo casi 16.000 trabajadores de la Comunitat», que ahora perciben su salario de forma normalizada.
Incorporaciones «con cuentagotas»
En cuanto a la afiliación interanual, en el mes de abril se registró un descenso del 6,5%, que suponen 29.824 afiliados menos. En este punto, el conseller Negueruela explicó que abril ha sido el primer mes que, de forma íntegra, ya permite comparar dos periodos en pandemia. No obstante en abril de 2020 los trabajadores fijos discontinuos todavía contaban como afiliados para poder acogerse a un ERTE. A partir del mes de octubre, pasaron a ser computados de otro modo, puesto que empezaron a cobrar una prestación extraordinaria específica y dejaron de ser considerados como afiliados.
Respecto a las afiliaciones, tanto Fernando Fernández, secretario general de UGT, como su homóloga en CCOO, Consuelo López, coincidieron ayer en señalar que si bien ya se están incorporando algunos fijos-discontinuos a sus puestos de trabajo, lo están haciendo «con cuentagotas, muy poco a poco», según López. Únicamente están llamando a sus trabajadores aquellos hoteles que «tienen la perspectivas de abrir este mes, pero no son muchos. De momento, tres o cuatro. Quizás para finales de mayo haya más», aventuró Fernández. Según López, además las grandes cadenas «sólo están abriendo uno de sus principales hoteles en la isla, no todos, igual que está ocurriendo en Mallorca», por lo que las reincorporaciones son, de momento, «residuales».
La presidenta de la Confederación de Asociaciones Empresariales de Balears (CAEB), Carmen Planas, considera «urgente» que lleguen ayudas a las islas «para reactivar la economía y recuperar el mercado laboral, ante un escenario de pérdida de tejido empresarial y laboral». Planas lamenta que esta Comunitat vuelva a estar a la cabeza de «la mayor caída de la afiliación y del mayor aumento de paro del conjunto nacional, siguiendo la tónica de este último año». Considera «muy preocupante que el paro haya crecido un 13,1%, cifra muy superior al incremento del 2,1% registrado en España». La presidenta de CAEB subraya que el aumento del desempleo afecta a todos los ámbitos de la actividad, si bien el sector primario es «el más perjudicado». «No tenemos -afirma- ni un minuto que perder, la vacunación es vital para recuperar la actividad económica. Estamos convencidos de que somos un destino seguro, pero es urgente consolidar el ritmo de vacunación y que las ayudas a las empresas más afectadas por la crisis se pongan en marcha de forma inmediata».
Coincidió con ella la secretaria de Acción Sindical de UGT en Balears, Ana Landero, que defendió continuar con la intensificación del proceso de vacunación para que las restricciones de los últimos meses sirvan para tener una buena temporada turística. Además, manifestó que la reactivación del empleo debe estar basada en un «empleo de calidad y no precario, como el que se ha creado este mes», en el que el contrato temporal ha sustentado el aumento de la contratación.
