Cualquier ilusión de que ayer el flamante portavoz del Govern, Iago Negueruela, aclarara cuáles son los planes de desescalada para las Pitiusas se quedó en nada. En menos de dos minutos (1.51 segundos, para ser exactos) el conseller despachó las preguntas a este respecto en una rueda de prensa que se alargó durante una hora y 43 minutos. «La isla de Ibiza está teniendo muy buen comportamiento, pero lo hace desde una situación mucho más dura», comenzó a responder Negueruela, que insistió en que el estado epidemiológico de Ibiza «preocupa mucho».
En este sentido, el portavoz señaló que hay que «continuar barajando las cifras de la isla de Ibiza» y que precisamente esta semana el Govern tiene previsto hablar con el Consell de Ibiza y los sectores afectados por las restricciones. Es decir, que se desconoce cuándo y cómo empezarán a aligerarse las medidas de prevención en la isla. Situación muy diferente a la que se vive en Mallorca, donde el Govern ya ha anunciado relajaciones en el sector de la restauración que se detallarán, como tarde, este viernes y que entrarán en vigor el 2 de marzo. Respecto a Formentera, Negueruela señaló que es la isla cuya situación epidemiológica «mejor comportamiento está teniendo». Aunque tampoco aclaró ningún horizonte en los esperados cambios.
Negueruela señaló que hay que «continuar barajando las cifras de la isla de Ibiza» y que precisamente esta semana el Govern tiene previsto hablar con el Consell de Ibiza y los sectores afectados por las restricciones
Ibiza cuenta en estos momentos con una incidencia a catorce días de 294 casos por cien mil habitantes, un 78,1% menos que hace dos semanas, cuando esta cifra era de 1.342. A siete días, este indicador es de 109, lo que indica que la afectación del coronavirus sigue en descenso. Las incidencias de Formentera son mucho más reducidas: 107 a dos semanas y 25 a una semana, tasas, ambas, por debajo de la media de Balears, que se sitúa en 118 casos a 14 días y 47 a siete, según los últimos datos publicados por la conselleria balear de Salud.
Por municipios, la incidencia sigue bajando en todos ellos. Vila y Sant Antoni son los que tienen las tasas a 14 días más elevadas: 382 y 308 casos por cien mil habitantes. Le sigue Santa Eulària, con 247; Sant Josep, con 230, y, por último, Sant Joan, con 109. En los cinco municipios la incidencia a siete días está por debajo de la mitad de la registrada a dos semanas, lo que adelanta que las tasas irán bajando en las próximas semanas.
El portavoz del Govern insistió en que la elevada presencia de la cepa británica en las islas obliga a ser «muy prudentes» a la hora de planificar la retirada de las restricciones.
Vacunaciones
El conseller insistió ayer en que la llegada de vacunas a las islas aumentará «proporcionalmente» respecto a otras comunidades en cuanto comience la vacunación de la población general. Negueruela detalló que las dosis se envían en función de los colectivos que se están vacunando, por lo que se envían más vacunas a zonas con población más envejecida.
«Cuando empiece la vacunación de la población general recibiremos porcentualmente más que otras comunidades», indicó el portavoz del Govern unas horas antes de que el Ejecutivo informara de la última remesa de vacunas recibidas en Balears: 7.020 de Pfizer que llegaron ayer y a las que hoy está previsto que se sumen 9.600 de AstraZeneca. Desde el Área de Salud de Ibiza y Formentera detallaron que está previsto que esta semana lleguen a Ibiza 1.300 dosis de AztraZeneca y 552 de Pfizer.
Por su parte, el presidente del Consell de Ibiza, Vicent Marí, se reunió ayer por la mañana con el impulsor de la plataforma Vacunas, Salud y Economía, Miquel Munar, con quien habló sobre «lanecesidad de conseguir, lo antes posible, la llegada masiva de vacunas para la población». Tanto Marí como Munar coincidieron en destacar que la vacunación «es la única herramienta eficaz para que las Pitiusas puedan superar los efectos sanitarios de la pandemia y recuperar la actividad económica perdida a causa del coronavirus».
