La Policía Local de Ibiza inicia mañana una campaña informativa sancionadora dirigida a usuarios de patinetes eléctricos y bicicletas. El objetivo es dar a conocer las normas de circulación establecidas en la modificación del capítulo tres de la Ordenanza Municipal de Circulación, que regula el uso de estos vehículos, y sancionar a quien las incumpla.

Vila ya ha avanzado que sancionará a los conductores que incumplan las normas con multas que van desde los 300 euros para las graves a las 600 para las muy graves. Incumplimientos como conducir bajo los efectos del alcohol se sancionarán como una infracción de la Ley de Seguridad Viaria, con 1.000 euros de multa.

La ordenanza municipal establece para el uso de patinetes eléctricos una edad mínima de 15 años. Además, los conductores deberán usar casco y ropa reflectante obligatoriamente. No se les permite la circulación por aceras o zonas destinadas a los viandantes y tampoco por las autovías.

Los usuarios de estos vehículos motorizados no podrán usar auriculares ni teléfono móvil y, como cualquier conductor, pueden ser sometidos a controles de alcohol y drogas.

En cuanto a los ciclistas, estará prohibido que circulen por las aceras, excepto para los menores de 8 años acompañados por un adulto a pie. Las bicicletas deben circular por los carriles bici, cuando los haya, o compartir las calzadas con coches y motos. Tampoco pueden usar auriculares ni cascos, y tampoco el móvil.

Patinetes eléctricos y bicicletas han de estacionar en los espacios dedicados a ellos en la ciudad y no pueden sujetarse a árboles ni farolas.