El servicio de salvamento y socorrismo de las playas del municipio de Sant Josep ha realizado un simulacro de rescate de un bañista accidentado en una zona rocosa de la costa, en las inmediaciones de sa Sal Rossa, para poner a prueba la preparación de su plantel.

«Es un ejercicio que nos permite comprobar la rapidez con que actuarían todos los elementos de la cadena que se tiene que activar en caso de emergencia, desde la comunicación y coordinación entre los profesionales desplegados en las playas y sus coordinadores a la reacción de las embarcaciones», explicó ayer el concejal de Playas y Litoral, Josep Guasch, en un comunicado.

Salvamento

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Los ejercicios se llevaron a cabo el pasado viernes al mediodía, cuando se inició el rescate de un bañista que simuló haberse golpeado la cabeza contra unas rocas al zambullirse. Los socorristas se desplazaron rápidamente a la zona de sa Sal Rossa, lanzándose al agua para valorar a la víctima, que, supuestamente, se encontraba consciente pero no podía mover las piernas.

Los socorristas estabilizaron al bañista para impedir cualquier movimiento brusco que pudiera agravar alguna posible lesión medular, hasta la llegada de la embarcación de salvamento.

El servicio de socorrismo seguirá activo en las playas del municipio hasta el 31 de octubre. Con la entrada en servicio del nuevo contrato público que presta la empresa Marsave, se ha reforzado la dotación de los socorristas y se ha garantizado una cobertura de todo el litoral del municipio. Estos operarios también han asumido la vigilancia de fondeos de embarcaciones sobre posidonia.