La mascarilla, incluso en familia, en casa, con los nuestros. Así de claro lo dejaron ayer el portavoz del Comité de Gestión de enfermedades Infecciosas de Balears, Javier Arranz, y la coordinadora del grupo de desconfinamiento del Govern balear, Marga Frontera, que por primera vez desde que comenzó la pandemia lucieron mascarilla durante su comparecencia pública para explicar la situación de las islas respecto al coronavirus.
«No sabemos dónde ha estado nuestro hijo», puso como ejemplo Arranz. «Nos preocupan la relajación que muestran imágenes como las de Sant Joan, en Menorca», comentó Frontera, que señaló que si bien la gente acostumbra a seguir las indicaciones en algunos entornos, como el laboral, se relaja en los de más confianza, como la familia o los amigos más cercanos. La experta reconoció que «psicológicamente» se hace difícil mantener las medidas de prevención en esas esferas más cercanas.
De hecho, Arranz recordó que los brotes confirmados en las islas hasta el momento han sido familiares, a excepción de uno localizado anteayer en Menorca que corresponde a unos turistas nacionales. Uno de esos diez brotes está localizado en Ibiza y en estos momentos, según Salud, hay nueve personas afectadas y doce contactos estrechos en seguimiento. Arranz detalló que para considerar que hay un brote debe haber, al menos, tres afectados «con relación epidemiológica». «Dos de esos brotes están a punto de cerrarse», apuntó el experto, que indicó que para que eso ocurra deben pasar al menos dos periodos de incubación del virus, es decir, 28 días, desde el último contagio confirmado del brote.
«Proteger a la población»
«Proteger a la población»Tanto él como Frontera defendieron el uso obligatorio de la mascarilla para evitar nuevos contagios. La coordinadora del grupo de desconfinamiento aseguró que la adopción de esta medida no tendrá consecuencias negativas en el turismo: «Los turistas quieren pasar sus vacaciones en un lugar seguro». De la misma manera, defendió adoptar una medida tan drástica como el uso obligatorio de mascarillas a pesar de que la situación epidemiológica en las islas no es comparable a la de otras zonas: 1,57 casos por 100.000 habitantes acumulado de la última semana en las islas frente a los 4,99 registrados en España. «Las medidas van dirigidas a proteger a la población», insistió Frontera, que calificó de «controlada» la situación epidemiológica de las islas.
La experta indicó que tomar esta medida supone «adelantarse» para evitar llegar al punto en el que se encuentran otras zonas del país. «Es el momento adecuado», insistió Frontera poco antes de que Arranz, preguntado por ello, descartara que se puedan sustituir las mascarillas por las pantallas. «No están recomendadas», afirmó.
Hotel para turistas con Covid
Hotel para turistas con CovidEl grupo hotelero Playasol anunció ayer que ha puesto a disposición de la conselleria balear de Salud uno de sus establecimientos para que ejerza como «hotel puente» en Ibiza. Es decir, para alojar y atender a los posibles turistas que, una vez en la isla, se constate que están contagiados por el coronavirus. Siempre que éstos estén asintomáticos o su estado sea leve.
La empresa detalla que el hotel «íntegramente reservado» para estos afectados se trata de La Noria, un dos estrellas ubicado en la zona de Sant Josep de Platja d'en Bossa. El establecimiento permanecerá abierto hasta final de temporada, el 30 de septiembre, y cuenta con 84 habitaciones y una capacidad máxima de 127 personas «distribuidas en 41 habitaciones individuales y 43 dobles».
Desde Playasol aseguran que el Govern ha agradecido «la colaboración ofrecida desde el ámbito público y privado para garantizar la protección de la salud pública». De la misma manera, la cadena recuerda que ha mantenido esta colaboración desde el inicio de la pandemia: «Ya facilitó la medicalización del establecimiento Tropical Garden durante el estado de alarma».
El hotel estará gestionado «íntegramente por las autoridades sanitarias» y los posibles turistas afectados ingresarán en él derivados «siempre» desde el Área de Salud de Ibiza y Formentera después de dar positivo en una prueba PCR. «Este hotel puente cuenta ya con un protocolo sanitario establecido», indica la cadena hotelera en su comunicado, en el que asegura que ofrece este espacio a la conselleria de Salud»para contribuir a la seguridad del destino y facilitar la reactivación de la actividad turística minimizando los riesgos».
