Los bomberos de Ibiza repartieron ayer 70 pantallas faciales antifluidos y 200 mascarillas quirúrgicas entre los centros de salud de Vila y Es Viver y tres residencias de la tercera edad (Can Blai, Can Raspalls y el Hospital Residencia Cas Serres), con el objetivo de que su personal pueda protegerse de posibles contagios de coronavirus ante la falta puntual de equipos de protección individual (EPI).

La iniciativa solidaria ha sido posible gracias a la colaboración de la ONG Bomberos sin Fronteras, a la que pertenecen algunos de los miembros del parque insular, que depende del Consell. «Llevábamos tiempo pensando en cómo ayudar, qué podíamos hacer en esta crisis sanitaria», explica el bombero Rufino Díaz, y esta ONG les ofreció la posibilidad de repartir estas pantallas entre el personal sanitario de la isla.

Entre todos los bomberos (la plantilla total del parque es de 58 profesionales) han recaudado alrededor de 2.000 euros, suficiente para pagar el material con el que están confeccionadas las pantallas. Tanto la manufactura en Málaga, donde tiene su sede Bomberos sin Fronteras, como el transporte de estos elementos les ha salido gratis. «Sólo hemos tenido que costear el material porque la mano de obra no la hemos pagado y Seur no nos ha cobrado» el traslado del material, apuntó Díaz.

A las pantallas han podido sumar en esta iniciativa solidaria 200 mascarillas quirúrgicas lavables que les había cedido la empresa Dulcesol. Todo está desde ayer a disposición del personal de las residencias y de los centros de salud de Ibiza. El reparto se ha hecho en función de lo que necesitaban y de la disponibilidad de artículos de protección de cada uno de estos centros, apunta Díaz.

Más en las residencias

Más en las residencias

«Entendemos que por ejemplo el Hospital Can Misses y también los centros de salud, deben tener más dotación» de medios. Por este motivo, el portavoz de los bomberos detalla que han sido las residencias las que más pantallas y mascarillas recibieron ayer.

Los bomberos son conscientes del peligro al que se expone el personal sanitario, un colectivo golpeado especialmente por el Covid-19. «Somos gente a la que le gusta estar en primera línea pero ahora no podemos por falta de formación y porque [la lucha contra el virus] no es nuestra atribución». Por todo ello, los bomberos de Ibiza entienden que el «protagonismo actualmente es de los sanitarios, a quienes tiene que cuidar la sociedad de manera especial porque sin ellos tendríamos un problema muy grave todos», advierte Díaz.