Los médicos del Hospital Can Misses comenzarán a atender a través de videoconferencia a los internos en el centro penitenciario de Ibiza, según confirma el Área de Salud de Ibiza y Formentera. El objetivo de esta iniciativa es reducir el número de traslados de presos al hospital, debido al elevado consumo de recursos que supone cada traslado, ya que se trata de usuarios que deben estar custodiados por agentes de los cuerpos de seguridad durante todo el tiempo que se prolongue la visita.
La puesta en marcha de este nuevo sistema de consultas es fruto de «muchos meses» de trabajo conjunto entre el Área de Salud de Ibiza y Formentera y el centro penitenciario de la isla. Había que pulir los detalles, especialmente en sistema de videoconferencia, para garantizar la intimidad del paciente.
Las consultas a distancia entre el hospital y la cárcel de Ibiza comenzarán este mismo mes, informan desde el Área de Salud de Ibiza y Formentera. De hecho, ya había dos previstas para las próximas semanas: una de ellas de uno de los internos con el servicio de Psiquiatría y otra de otro preso que, como ya disfruta de su libertad, se celebrará de forma presencial.
Desde el Área de Salud Pitiusa destacan los recursos que eran necesarios para estos traslados, en los que se emplea un furgón blindado y que, además, requiere vigilancia por parte de los cuerpos de seguridad durante todo el tiempo en el que se alargue el proceso. Además, coordinar estos traslados requería un gran esfuerzo por parte de las dos administraciones, recalcan.
Con este nuevo sistema no se evitarán todos los traslados de presos al hospital, pero sí buena parte de ellos. La intención es que los internos en el centro penitenciario sólo tengan que acudir al hospital para intervenciones o pruebas diagnósticas, pero no para las consultas. En la planta de Medicina Interna, explican desde el Hospital Can Misses, hay una habitación reservada para los presos, en el caso de que tengan que quedarse ingresados.
Médico de la prisión
Médico de la prisión
Desde el Área de Salud explican que cada mes se efectúan, de media, unos 28 traslados de la prisión al hospital. Esto, matiza la gerencia de Can Misses, no significa que se haya atendido a 28 presos, ya que uno de ellos puede haber necesitado acudir varias veces al hospital para diferentes consultas con especialistas. Aunque la media es de 28 mensuales, en el mes de mayo se atendió a 31 presos y el pasado mes de junio, a 24, detallan.
Según explican, será el propio médico de Atención de Primaria del centro penitenciario de Ibiza, que es quien atiende habitualmente a los internos, el que, cuando lo considere necesario, solicitará una consulta con el especialista. Para esto, explican, se pondrá en contacto con la dirección médica del hospital, que valorará cada caso con el servicio concreto para el que se solicite atención y, en el caso de que sea posible, se autorizará la consulta telemática. Cuando los médicos consideren que no es posible atender la consulta a través de videoconferencia, entonces se pondrá en marcha todo el proceso para el traslado del preso al hospital, para lo que se requiere cuadrar las citas con la disponibilidad de recursos de custodia, para llevar a cabo los desplazamientos con las máximas garantías de seguridad.
El sistema de videoconferencia mediante el que se llevarán a cabo las consultas no es una simple videollamada, sino que se trata de un sistema especial con sistemas de seguridad que garantizan que se mantiene la confidencialidad del paciente durante la consulta.
