El Ayuntamiento de Sant Antoni ha interpuesto cinco sanciones al hotel Casa Cook de Cala Gració, que finalizó sus obras de reforma hace escasos días. Para ello el Consistorio aprovechó la posibilidad prevista en el mismo expediente de licencia para iniciar un proceso de sanción. De esta forma, actuó contra cinco incidentes producidos desde el pasado mes de enero.

Así, la concejalía de obras incluyó en el expediente de sanción cinco incidentes. Uno del mes de enero, otro en febrero, dos en junio y el último en julio. Las sanciones se deben a molestias vecinales en tres ocasiones, a un movimiento de tierras y a una quema de residuos. Las dos últimas, las producidas en los meses de junio y julio donde se han concentrado más quejas vecinales, corresponden a movimiento de tierras y a molestias a los residentes.

Además de estas sanciones, desde el Ayuntamiento insisten en que se paralizaron los trabajos que no permite la ordenanza en la temporada estival y que, según los responsables de la obra, solo se produjeron en un caso puntual (el del movimiento de tierras), ya que todos los trabajos que impide la ordenanza habían finalizado antes del uno de mayo.

Sin embargo, los vecinos del establecimiento siguen con sus quejas a cuenta de los ruidos que produce el hotel y, sobre todo, su maquinaria. En estos últimos días el problema para los que residen junto al edificio recién reformado se centra en el restaurante.

La queja principal se debe al ruido que, según algunos vecinos, producen los extractores de la cocina y las máquinas de aire acondicionado. Aseguran que es «imposible descansar» y que se oye incluso «con las ventanas cerradas». Los vecinos piden que se lleve a cabo la insonorización de las máquinas con pantallas acústicas.

Los responsables de las obras del hotel Casa Cook, propiedad de la cadena de hoteles del mismo nombre del turoperador Thomas Cook, reconocieron que se habían cometido errores al producir ruidos fuera del horario fijado. Así que pidieron perdón y llegaron a un acuerdo con los vecinos para instalar seis farolas en la calle. Esto se debe a que la ordenanza municipal de Sant Antoni, al contrario que en otros municipios, permite que ciertas obras continúen durante el verano. Así, paraliza trabajos de movimiento de tierras, estructuras y demoliciones. También limita otras actividades como las que producen ruidos, aunque se pueden realizar entre las 11 y 14 horas y las 16 y las 18h.