El propietario de la Policlínica Nuestra Señora del Rosario, Francisco Vilás, ha descartado finalmente dar el salto a la política y concurrir a las próximas elecciones locales de mayo. Vilás trabajaba en la posibilidad de presentar una candidatura «independiente y liberal» al Consell, aunque también ha mantenido contactos con otros partidos, como Ciudadanos.

Sin embargo, Vilás ha decidido dar marcha atrás al considerar que las posibilidades de obtener un buen resultado son mínimas debido al inesperado adelanto de las elecciones generales (28 de abril). Previamente, había desechado la opción de ir en la lista de otro partido. «Todos los partidos pequeños desaparecemos del mapa en el momento que se avanzan las elecciones. Las encuestas apuntan que se producirá una polarización del voto terrible», explica el médico y empresario, en referencia a la disputa de los grandes partidos en las generales, que, según su criterio, condicionará, después, las posibilidades de las formaciones pequeñas en las municipales.

«Si hubiera una diferencia de tres meses entre las elecciones generales y las municipales otro gallo cantaría», indica Vilás, que agrega que cuando se celebren los comicios locales (un mes después) «aún se discutirá la formación de Gobierno en España», lo que, considera, incidirá en la votación en las municipales en perjuicio de los partidos pequeños. «El voto en las locales será un problema menor».

A finales de enero, Vilás aseguraba, según los sondeos de la empresa de comunicación de Madrid que trabajaba en su candidatura, que podría obtener «suficientes votos para ser decisivo» en el Consell. «Y obligar con ello a los demás partidos a que los intereses de Ibiza pasen por delante de todo». En ese momento, Vilás justificaba que la gente está «harta de tanto folclore político» y que él mismo pasaba «vergüenza» al ver que «Ibiza está en manos de políticos incapaces de mirar más allá de sus carreras profesionales».

Hay que tener en cuenta, además, que Vilás mantiene un enfrentamiento con el candidato del PP al Consell, Vicent Marí, contra el que presentó una querella que fue archivada, en su lucha contra el proyecto de construcción de un segundo hospital privado en la isla.