El Ayuntamiento de Sant Josep ha llegado a un acuerdo con el propietario de unos terrenos de 8.000 metros cuadrados en Cala Vedella (cerca del mirador recién inaugurado) para habilitarlos este verano como aparcamiento para cerca de 200 vehículos. El solar está próximo a la playa y el estacionamiento será gestionado por la asociación de vecinos de la zona, mediante un acuerdo con la propiedad. Sant Josep intenta acabar así con el colapso circulatorio que ha provocado que decenas de conductores aparcaran sobre la arena.

Este acuerdo fue anunciado ayer por el alcalde de Sant Josep, Josep Marí Ribas, después de la reunión de la Mesa de Turismo de la localidad, en la que se analizaron las cifras «positivas» de visitantes y de ocupación turística de este inicio de temporada. Los empresarios que participaron en la reunión mostraron su inquietud por el intrusismo, un problema al que el Consistorio hace frente con «las primeras batidas contra la venta ambulante», en colaboración con la Guardia Civil, según explicó el Ayuntamiento en una nota.

«Molestias» en Cala de Bou

«Molestias» en Cala de Bou

Marí Ribas aseguró también al término de la sesión de la Mesa de Turismo, en la que estuvieron presentes el director general de Turismo del Consell, Vicent Torres, y la concejala de Turismo, Helena Benlloch, que es «muy consciente de las molestias que están provocando» a los vecinos las obras de sustitución del obsoleto colector de Cala de Bou.

«Las obras -reconoció el alcalde de Sant Josep- tenían que haberse hecho antes, no estamos contentos». Sin embargo, «posponer el problema hubiese significado continuar con las continuas averías» a lo largo de todo el verano, añadió Marí Tur.