La Guardia Civil detuvo ayer a dos hombres (P. B. y A. D. R. B) por la muerte violenta de B. U. M., un suizo de 58 años, cuyo cuerpo sin vida fue hallado por la mañana en el antiguo delfinario de Sant Jordi, donde convivían los arrestados y el fallecido.

El servicio de Emergencias del 112 de Balears recibió el aviso de que un hombre de nacionalidad suiza había sido encontrado muerto en el antiguo delfinario de Sant Jordi, situado en el camino de sa Sal Rossa. Hasta el lugar del suceso se desplazaron una ambulancia del 061, la Policía Local de Sant Josep y la Guardia Civil. Allí, los agentes comprobaron que el cadáver presentaba signos de violencia. Fuentes de la investigación concretaron que había sufrido un fuerte golpe en la cabeza. Un testigo del suceso también relató a este diario que la noche anterior había escuchado «gritos y palazos» procedentes de esta instalación abandonada. La Benemérita confirmó que el desencadenante del crimen fue una pelea entre los okupas, pero no aportó más detalles sobre lo ocurrido.

Ayer, un profesional del Instituto de Medicina Legal de los Juzgados de Ibiza se desplazó hasta el lugar del suceso a las 9 horas para ordenar el levantamiento del cadáver. Sin embargo, esta diligencia judicial no se llevó a cabo hasta cinco horas más tarde. Una portavoz del Tribunal Superior de Justicia de les Illes Balears (Tsjib) explicó que el Juzgado de Instrucción número 3 de Ibiza, en funciones de guardia, había abierto una investigación por este caso.

A mediodía, dos agentes de la Benemérita custodiaban el acceso al antiguo delfinario, donde se encontraba el cuerpo sin vida de B. U. M. Efectivos del Equipo de Homicidios y del laboratorio de Criminalística se desplazaron de Palma a Ibiza para esclarecer las causas de la muerte de este okupa de nacionalidad suiza.

Los efectivos

Minutos más tarde llegaron efectivos de la Policía Judicial de la Guardia Civil de Ibiza y del GEAS (Grupo Especial de Actividades Subacuáticas) y se precintó el acceso al antiguo delfinario, okupado por tres personas.

La titular del Juzgado de Instrucción número 3, Carmen Martín, en funciones de guardia, una fiscal, el secretario judicial y un profesional del Instituto de Medicina Legal se personaron poco antes de las 14 horas en el lugar del suceso. Finalmente, a las 14.20 horas, se ordenó el levantamiento del cadáver, que fue trasladado por tres operarios de Pompas Fúnebres.

Las reacciones

El caso conmocionó ayer a vecinos y trabajadores de la zona, ya que uno de los tres okupas, A. D. R. B., de nacionalidad española y de 64 años, es muy conocido. De hecho, varias personas preguntaron a los profesionales de los medios de comunicación que se encontraban en el lugar del suceso si el fallecido era este hombre, que fue detenido ayer por la Guardia Civil.

Los dos hombres arrestados han pasado la noche en el calabozo del cuartel de Can Sifre y no está previsto que pasen hoy a disposición judicial.