PSOE y Sumar ignoran el fenómeno migratorio en su acuerdo de gobierno

Ni una palabra sobre el fenómeno migratorio que cada vez se hace más presente en la realidad del país y que en los últimos meses está provocando una nueva crisis humanitaria en Canarias como consecuencia de la oleada de llegada de pateras y cayucos procedentes de África, con más de 28.000 migrantes en lo que va de año, de ellos más de 13.000 en este mes de octubre. El PSOE y Sumar ignoran por completo esta cuestión en su acuerdo de posible gobierno para los próximos cuatro años que sus respectivos líderes, Pedro Sánchez y Yolanda Díaz, a su vez presidente y vicepresidenta segunda en funciones, firmaron este martes en Madrid. Solo una leve referencia al objetivo de alcanzar un pacto de Migración y Asilo en el marco de la UE es lo que incluye el documento de 48 páginas. Y esa referencia es tan escueta que ni siquiera define o identifica las posiciones españolas y sus reclamaciones ante los socios comunitarios a este respecto.

El documento presentado por Sánchez y Díaz en un acto en el Museo Reina Sofía, en el que no se sometieron a preguntas de los medios de comunicación, será la base del discurso de investidura que el candidato socialista deberá afrontar antes del día 27 de noviembre. A ese documento, titulado 'Una nueva coalición de gobierno progresista en España', habrá que añadir algunos puntos que el PSOE pacte en las próximas semanas con los otros grupos de los que necesita el apoyo. Y si ninguno de ellos le exige alguna medida relacionada con el fenómeno migratorio, poco dará de sí a este respecto el programa de gobierno que presente el líder socialista si mantiene el guion del documento presentado el martes y el de las propias intervenciones de ambos dirigentes.

En concreto, el acuerdo con el que PSOE y Sumar pretenden reeditar su gobierno de coalición, siempre que Sánchez logre la investidura y la legislatura se inicie de forma efectiva, se limita a señalar que “trabajaremos en favor de un nuevo Pacto de Migración y Asilo, que esté en línea con los valores de dignidad humana y solidaridad establecidos en nuestros Tratados”, sin ninguna otra referencia a la distribución de migrantes que lleguen a los países ribereños entre los demás socios comunitarios, u otras medidas de rescate en el mar o de ayuda o financiación para la acogida. Sánchez, en su intervención en el acto en el que se presentó el acuerdo, mencionó de pasada esta cuestión pero únicamente para enfatizar el empeño español en lograr ese pacto europeo en materia migratoria.

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De entre las negociaciones que los socialistas tienen pendientes, sólo la que podría abrir con CC abre expectativas de que el programa de gobierno que proponga en la investidura incluya alguna referencia más extensa a la cuestión migratoria, o incluso al caso concreto de la crisis humanitaria en las Islas. Pero no parece previsible que cualquiera de las negociaciones con los otros grupos, PNV, BNG, Bildu y los independentistas catalanes de ERC y Junts pongan el acento en ello. Las recientes visitas de los ministros del Interior, Fernando Grande-Marlaska, y de Migraciones, José Luis Escrivá, a Canarias con motivo de la actual crisis migratoria, y sus respectivas reuniones con el presidente de Canarias, Fernando Clavijo, ha parecido tener la menor incidencia en las negociaciones entre socialistas y Sumar para hacer que la cuestión migratoria fuera incluida en el acuerdo.

También ha pasado inadvertido para los dos socios aspirantes a conformar un nuevo Gobierno estatal el Pacto Canario por la Migración firmado por todos los partidos políticos de las Islas salvo Vox, o las imágenes transmitidas por todas las televisiones del país sobre llegadas de cientos de migrantes cada día a El Hierro y otras islas, y el evidente desbordamiento de las instalaciones de acogida. Son cuestiones sobre las que el PSOE al menos se verá obligado a tener en cuenta si sigue adelante en las anunciadas negociaciones con CC para conseguir la abstención de los nacionalistas canarios a la investidura de Sánchez. En concreto, la formación isleña reclama en este sentido, además de participar en negociaciones con Marruecos sobre temas migratorios, que el Estado lidere un cambio legislativo para que el Estado asuma el reparto por todo el territorio español de menores migrantes no acompañados. Actualmente, Canarias acoge a más de 4.000 de estos menores no acompañados.

Política territorial

Añade que “mientras esta reforma no se produzca, en los Presupuestos Generales del Estado se garantizará a la Generalitat Valenciana y al resto de Comunidades Autónomas infrafinanciadas la prestación de los servicios públicos al mismo nivel que el resto del Estado”, y concluye asegurando que “reforzaremos y extenderemos la cogobernanza desde el diálogo, la lealtad institucional y la colaboración territorial”. Ninguno de estos enunciados aclara de qué forma y bajo qué criterios básicos se hará el reparto de los fondos estatales entre las distintas regiones para que cubran sus gastos en sanidad, educación y servicios sociales. Llama la atención además, seguramente por la influencia de Compromís en Sumar y, por tanto, en el tipo de acuerdo alcanzado, que se mencione de forma directa únicamente a la Comunidad Valencia como región a la que se le reconoce la “infrafinanciación”.

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