Consejos para viajar cuando hay deterioro cognitivo
Hablamos con el Dr. Oriol Franch, jefe del Servicio de Neurología del Hospital Ruber Internacional
Una persona con cardiopatía estable y en tratamiento puede viajar, dependerá de su enfermedad de base el destino y tipo de actividades a realizar.
No se recomienda en casos de inestabilidad, síntomas importantes o necesidad de visitas médicas frecuentes.
Los pacientes con cardiopatía por lo general se visitan en forma rutinaria con su cardiólogo y es aconsejable que comenten con su médico sus planes de viaje.
Planificar el viaje y las actividades de acuerdo con la capacidad física y su estado de salud.
Tener en cuanta según su patología la presencia de servicios médicos en caso de necesidad.
En principio no, pero depende de su enfermedad de base, su condición física y la necesidad de acudir un centro de salud en caso de urgencia.
El viaje en avión es un momento de estrés para todos, es importante en caso de una afección crónica como la hipertensión arterial no dejar de tomar la medicación, si está correctamente controlada, no hay que preocuparse al subir a un avión.
Respecto al infarto de miocardio o el accidente cerebrovascular, esto depende de varios factores.
En el periodo agudo de estas patologías (primeros días) no es recomendable que viaje. Pueden ser necesarias revisiones médicas o pueden aparecer nuevos síntomas que requieran consulta.
Si se encuentra estable y ha superado la fase aguda de la enfermedad puede volar sin complicaciones.
No requiere más medicación que le prescrita por su médico.
Respecto a las vacunas, los pacientes con cardiopatía deben tener al día la vacunación para el neumococo, la gripe y el covid-19. En ciertas regiones puede ser necesaria vacunación por enfermedades endémicas, que en general aplican a toda la población. y no exclusivamente a los cardiópatas.
Informe médico detallando su enfermedad para ser presentado en caso de necesidad.
Medicación habitual (teniendo en cuenta la cantidad acorde a los días que estará fuera) con la prescripción correspondiente.
Tener en cuenta los efectos de ciertos medicamentos a la hora del viaje (por ejemplo los diuréticos y la necesidad de ir al lavabo con mayor frecuencia)
Mantener y respetar el horario de la medicación pautada por su médico.
Evitar las transgresiones en la dieta (incluido el consumo de alcohol)
Realizar actividad física acorde con su capacidad funcional y evitar esfuerzos a los que no está habituado.
Si no hubo ninguna incidencia durante el viaje, puede acudir a su control habitual sin urgencias.
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