El 8,5% del territorio de la isla de Ibiza está ocupado con las denominadas cubiertas artificiales, la que constituyen las zonas urbanizadas, incluidas las viviendas dispersas en el campo, polígonos industriales, carreteras, puertos y aeropuertos, entre otras construcciones. Las áreas naturales comprenden el 52,5% de la superficie de la isla y el 39,2%, las cubiertas modificadas, fundamentalmente las zonas agrarias y caminos rurales. Sólo el 9,6% del total del territorio urbanizado con viviendas (268,7 hectáreas) se corresponde con los núcleos urbanos, mientras que la mayor parte, el 57,3% (1.594 hectáreas), son urbanizaciones laxas (áreas residenciales o núcleos turísticos; es decir, sobre todo urbanizaciones de la costa: agrupaciones de viviendas con jardines y piscina) y el 33% (916 hectáreas) con la urbanización dispersa (casas en el campo o agrupación de éstas en núcleos rurales).
Esta es la foto fija de 2018 según refleja la nueva cartografía de ocupación del territorio elaborado por la fundación IbizaPreservation, con la colaboración del Observatorio Socioambiental de Menorca (Obsam), con un coste de 100.000 euros, de los cuales el Consell de Ibiza ha aportado 14.000 euros. La importancia de este nuevo visor cartográfico, accesible a todos los ciudadanos a través de la web de la fundación IbizaPreservation y el Consell, radica en su definición y detalle, con una escala 1:5.000, «nunca vista hasta ahora en Ibiza», según ha destacado el vicepresidente del Consell, Mariano Juan, en la presentación del nuevo mapa, en el que se recoge una base de datos de hasta 106.000 registros.
David Carreras, uno de los autores de la cartografía, junto a Esteve Palou, Laura San Miguel y Jaume Espinosa, indicó que la unidad mínima que se visualiza es un área de 500 metros cuadrados; es decir, círculos de 25 metros de diámetro. También se detallan los elementos lineales de más de cuatro metros de ancho y cualquier edificación o elemento visible a partir de cuatro metros cuadrados (dos por dos metros).
Mariano Juan ha reconocido su «sorpresa», al ver el resultado de los datos obtenidos, porque «destierra muchas sensaciones y fantasmas que tenemos», en referencia a que casi el 92% del territorio está formado por zonas naturales o agrícolas, y «sólo un 8,5% de urbanización». «No es lo que se suele oír en el debate de la calle», ha advertido.
Dicho esto, tal como reflejan los datos, Juan indició que en Ibiza existe «un problema de dispersión» urbana. «Ya lo sabemos. Sobre todo viene por la urbanización laxa. Una casa en el campo no es un gran problema. En cambio, una urbanización cerca de la costa si genera problemas de gestión», ha remarcado. Así, el vicepresidente ha agregado que el debate sobre urbanismo se centra en «lo que quizá menos efectos tiene sobre el territorio, que son las casas en el campo, cuando en realidad el gran reto en la gestión del territorio se halla en el suelo urbano», ha resaltado, al tiempo que ha destacado «la gran desproporción» entre la urbanización compacta y las urbanizaciones de la costa. «Hay que compactar las conurbanizaciones, los espacios entre medio de zonas urbanas que no están desarrolladas y hablar de intensidad de uso en zonas urbanas en lugar de trasladar la falta de gestión y de planeamientos urbanísticos actualizados al suelo rústico», ha dicho Juan.
Ahora, el siguiente paso es ampliar la información cartográfica a partir de fotos aéreas más antiguas al objeto de evaluar la evolución y, con ello, según ha explicado el vicepresidente, elaborar la revisión en profundidad del Plan Territorial Insular (PTI). Precisamente, Juan ha reconocido que, tal como prometió el PP en las pasadas elecciones locales, la revisión del PTI ya "debería estar en marcha", pero una de las causas de que no sea así es por la falta de "datos reales" como los que ofrece la nueva cartografía. Ahora, tal como ha publicado este diario, el Consell trabaja en una modificación puntual del PTI para "resolver problemas concretos del día a día en suelo rústico", pero que "no suponen cambios importantes".
