El primer teniente de alcalde de Sant Antoni, Joan Torres, explicó ayer que la capa de asfalto que alcanza hasta las paredes de la calle Santa Agnès, en el West End, es «provisional» y se ha colocado, en una decisión compartida con los vecinos y empresarios de la zona, para cubrir las obras inacabadas de renovación de los servicios soterrados y la incorporación de la canalización de recogida de pluviales. Ya se ha finalizado la instalación de todas las canalizaciones, pero queda pendiente la pavimentación de la superficie.
Torres explicó que las obras, con un coste de alrededor de medio millón de euros, debían estar acabadas el 30 de marzo, pero diversas «circunstancias», entre ellas «las lluvias de noviembre y febrero», impidieron que la constructora cumpliera con el plazo. Ante esta situación, el Ayuntamiento planteó a los empresarios del West seguir con las obras o parar y cubrirlas provisionalmente con una capa de asfalto, que es lo «más barato». Los empresarios y vecinos se decantaron por esta última opción para empezar la temporada turística este mes.
Torres dijo que desconocía qué «sobrecoste» supondrá la instalación de esta capa provisional de asfalto, que, tras la temporada, se tendrá que levantar para adoquinar la calle. Al ser preguntado sobre si sancionará a la constructora por incumplir los plazos de ejecución de la obra, Torres dijo: «Hablar ahora de penalizaciones... prefiero ni nombrarlo».
