Mallorca e Ibiza están entre los destinos que registraron peor facturación hotelera en 2021 por las consecuencias de la pandemia y su dependencia de la demanda extranjera, con una caída importante de los ingresos de sus hoteles abiertos y un importante volumen medio de los que han permanecido cerrado, según el Barómetro de la rentabilidad y empleo de los destinos turísticos urbanos y vacacionales españoles de la Alianza para la Excelencia Turística (Exceltur).

De este modo, los ingresos por los hoteles abiertos se redujeron en Sant Josep un 43,9% y en Sant Antoni, un 30,8%.

Como resultado de esta evolución, en 2021, Ibiza sí lideró los niveles de ingresos por habitación abierta con 156,3 euros, por delante de Chiclana de la Frontera (153,3 euros), Estepona (141,8 euros), Santa Eulària (125,9 euros), Marbella (11,3 euros) y Sant Josep (101,4 euros).

El Barómetro de 2021 de la rentabilidad y empleo de los destinos turísticos urbanos y vacacionales españoles elaborado por Exceltur muestra cómo los resultados turísticos en España el pasado año estuvieron marcados por el tirón de la demanda española a partir de mayo por el doble efecto de las ganas de viajar, favorecido por el ahorro acumulado, y la imposibilidad de viajar al extranjero, concentrando sus viajes en los destinos españoles.

Los destinos vacacionales de predominio de demanda española cierran el año con un mejor desempeño, gracias a los meses de verano (en algunos por encima incluso de los valores de 2019), mientras los que más sufren son las ciudades y destinos de mayor demanda extranjera y de largo radio.

Los destinos de predominio de demanda nacional registraron un mejor resultado en España el pasado año (-12,9% los ingresos por habitación de los hoteles abiertos frente a 2019, gracias a la mejora en precios por la positiva tendencia de los productos premium), con una fuerte disparidad, manifestada en el hecho de mantener el 36,3% de las plazas cerradas respecto a 2019, concentradas en las zonas de mayor demanda extranjera.