Los taxistas de Vila siguen saliendo a la calle en su semana de protestas y ayer se concentraron frente a las oficinas municipales del Cetis. Unas cincuenta personas de este colectivo mostraban así su rechazo al decreto municipal que les obliga a inmovilizar cada vehículo durante un día a la semana en la temporada turística. El Ayuntamiento insiste en que, con esta medida, quiere garantizar que no se exceden los tiempos de conducción y se cumplen con las libranzas y los tiempos de descansos establecidos entre jornadas.
Minutos antes de la protesta, el concejal de Transportes, Aitor Morrás, incidió en que recurrirá a esta inmovilización semanal de los vehículos «para garantizar un servicio seguro». Asimismo, recordó que el Ayuntamiento prefiere implantar un sistema de identificación del conductor durante las horas que se encuentra al volante.
El concejal defiende que su propuesta evitaría que cada taxi tuviera que quedar fuera de servicio un día a la semana, «pero la patronal nunca ha querido este sistema».
«Prefieren convocar este parón patronal y enconarse en unas posturas que no son las apropiadas para garantizar un servicio de transporte seguro», lamentó Morrás. El concejal también criticó a los taxistas, a los que acusó de cumplir con la totalidad de los servicios mínimos.
"Espero que la patronal entre en razón y entienda que debemos procurar que el servicio de taxi sea seguro".
El Ayuntamiento y la Asociación de Taxistas Autónomos de la Ciudad de Ibiza, la entidad que ha impulsado las movilizaciones, acordaron que ayer se destinaran 15 taxis en los turnos de mañana y tarde y seis durante la noche. Según Morrás, por la mañana no estaban en servicio tres de los vehículos designados para los servicios mínimos.
El concejal también anunció que convocará una reunión esta semana con los representantes de los taxistas del municipio. «Espero que la patronal entre en razón y entienda que, desde la Administración, debemos procurar que el servicio de taxi sea seguro».
«Se nos pone en duda»
Por su parte, el presidente de la Asociación de Taxistas Autónomos de la Ciudad de Ibiza, Alejandro Cardell, valoró que el sector estaba secundando el parón de manera mayoritaria, «en un 98 o 99%». También replicó a las acusaciones de Morrás sobre el supuesto incumplimiento de los servicios mínimos.
«No puede confirmar si estaban o no y ya le dijimos que a lo mejor faltaba alguno de los taxis. De todas maneras, no es un número significativo», manifestó el representante de la asociación mayoritaria de este sector. Cardell también expresó sus quejas por las manifestaciones de Morrás sobre los descansos de los conductores. «Es sorprendente que un concejal ponga en duda que tanto los trabajadores asalariados como nosotros [los conductores titulares de una licencia de taxi] tenemos días libres y jornadas adecuadas a la ley».
"Regulamos nuestros días libres con los empleados y vuelvo a recalcar que todos los taxistas libramos"
En este sentido, insistió en que las libranzas se acuerdan entre los trabajadores y los empleadores. De hecho, en la caravana del lunes, secundada por numerosos asalariados, estos mostraron sus quejas porque temen que, con un calendario preestablecido, ya no podrán elegir las fechas de sus días libres a conveniencia.
«Es verdad que somos un servicio público, pero explotado de manera privada. Regulamos nuestros días libres con los empleados y vuelvo a recalcar que todos los taxistas libramos», abundó Cardell.
Los taxistas de Vila convocan para esta jornada una nueva caravana de protesta que, a partir de las diez y media de la mañana, recorrerá las principales calles de Vila. Las movilizaciones seguirán mañana con una marcha a pie desde Vara de Rey a la sede del Ayuntamiento en Dalt Vila y, el viernes, con una nueva caravana.
