El cierre de la hostelería favoreció que, el domingo pasado, Corona recibiera más visitantes que nunca para contemplar la floración de los almendros. Varios vecinos se toparon con los accesos a sus casas bloqueados por coches aparcados o con gente que arrancaba las flores de los árboles para prepararse un ramo, por lo que el Ayuntamiento ha preparado un dispositivo para evitar que se repitan estos actos.
Paseo vigilado entre los almendros
Vicent Mari;
El cierre de la hostelería favoreció que, el domingo pasado, Corona recibiera más visitantes que nunca para contemplar la floración de los almendros. Varios vecinos se toparon con los accesos a sus casas bloqueados por coches aparcados o con gente que arrancaba las flores de los árboles para prepararse un ramo, por lo que el Ayuntamiento ha preparado un dispositivo para evitar que se repitan estos actos.
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El cierre de la hostelería favoreció que, el domingo pasado, Corona recibiera más visitantes que nunca para contemplar la floración de los almendros. Varios vecinos se toparon con los accesos a sus casas bloqueados por coches aparcados o con gente que arrancaba las flores de los árboles para prepararse un ramo, por lo que el Ayuntamiento ha preparado un dispositivo para evitar que se repitan estos actos.
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Vicent Mari
El cierre de la hostelería favoreció que, el domingo pasado, Corona recibiera más visitantes que nunca para contemplar la floración de los almendros. Varios vecinos se toparon con los accesos a sus casas bloqueados por coches aparcados o con gente que arrancaba las flores de los árboles para prepararse un ramo, por lo que el Ayuntamiento ha preparado un dispositivo para evitar que se repitan estos actos.
Paseo vigilado entre los almendros
Redacción
El cierre de la hostelería favoreció que, el domingo pasado, Corona recibiera más visitantes que nunca para contemplar la floración de los almendros. Varios vecinos se toparon con los accesos a sus casas bloqueados por coches aparcados o con gente que arrancaba las flores de los árboles para prepararse un ramo, por lo que el Ayuntamiento ha preparado un dispositivo para evitar que se repitan estos actos.
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Vicent Mari
El cierre de la hostelería favoreció que, el domingo pasado, Corona recibiera más visitantes que nunca para contemplar la floración de los almendros. Varios vecinos se toparon con los accesos a sus casas bloqueados por coches aparcados o con gente que arrancaba las flores de los árboles para prepararse un ramo, por lo que el Ayuntamiento ha preparado un dispositivo para evitar que se repitan estos actos.
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El cierre de la hostelería favoreció que, el domingo pasado, Corona recibiera más visitantes que nunca para contemplar la floración de los almendros. Varios vecinos se toparon con los accesos a sus casas bloqueados por coches aparcados o con gente que arrancaba las flores de los árboles para prepararse un ramo, por lo que el Ayuntamiento ha preparado un dispositivo para evitar que se repitan estos actos.
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El cierre de la hostelería favoreció que, el domingo pasado, Corona recibiera más visitantes que nunca para contemplar la floración de los almendros. Varios vecinos se toparon con los accesos a sus casas bloqueados por coches aparcados o con gente que arrancaba las flores de los árboles para prepararse un ramo, por lo que el Ayuntamiento ha preparado un dispositivo para evitar que se repitan estos actos.
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El cierre de la hostelería favoreció que, el domingo pasado, Corona recibiera más visitantes que nunca para contemplar la floración de los almendros. Varios vecinos se toparon con los accesos a sus casas bloqueados por coches aparcados o con gente que arrancaba las flores de los árboles para prepararse un ramo, por lo que el Ayuntamiento ha preparado un dispositivo para evitar que se repitan estos actos.