La presidenta del Consell de Menorca y la alcaldesa de Maó, Susana Mora y Conxa Juanola, visitaron ayer las instalaciones de Endesa en Ibiza, que disponen ya de las mejoras tecnológicas que han permitido reducir las emisiones de óxido de nitrógeno, NOx, y que la eléctrica quiere implementar también en su central menorquina.

Endesa recuerda en una nota que su central en Menorca debe cumplir el 1 de enero de 2020 con «los valores límite» de emisiones, «más restrictivos, que a partir de esa fecha fija la directiva europea de emisiones industriales».

El objetivo de esta visita era que los representantes políticos de la isla de Menorca pudieran conocer «la tecnología que [la centra del Ibiza] utiliza para reducir sus emisiones».

Endesa señala que las turbinas de gas más modernas de Ibiza funcionan ya con la tecnología que quieren implantar en Menorca.

Como publicó este diario el pasado martes, a partir del año que viene la central eléctrica ibicenca no podrá funcionar más con fuel, el combustible más contaminante de los que se emplean en las instalaciones del polígono de es Gorg.

La Comisión de Medio Ambiente de les Illes Balears acordó, el jueves 25 de enero pasado, retrasar hasta el 1 de enero de 2020 (un año más tarde de lo previsto) la obligación de la compañía eléctrica de cumplir con los nuevos valores límites de emisiones de gases contaminantes que marca la Unión Europea en sus cuatro motores denominados MAN (de gas) de la central ibicenca.