Voluntarios y usuarios de las residencias de mayores de Cas Serres y Reina Sofía criticaron el viernes el trato recibido por el Ayuntamiento en la feria, ya que les convocaron para ver un espectáculo medieval que finalmente «apenas duró cinco minutos» y, además, cuando llegaron «no estaban las sillas preparadas para los usuarios». La concejala de Cultura, Lina Sansano, matizó ayer que hubo «una cierta descoordinación porque los visitantes llegaron como tres cuatros de hora antes de lo previsto y las sillas se despliegan cinco o diez minutos antes porque es una zona de paso [al lado del Mercat Vell]». Respecto a las críticas sobre el espectáculo en sí, Sansano dice que se hizo «lo que se pudo hacer en ese momento» ya que las actuaciones se reparten por toda la feria.