Entre el 1 de junio y el 30 de septiembre el Govern balear, a través de PortsIb, organismo dependiente de la conselleria de Movilidad, tendría que poner en servicio los 116 amarres ecológicos en los tres campos de boyas, de fondeo regulado de las Pitiusas, todos situados en aguas del Parque Natural de ses Salines. Sin embargo los trabajos empezaron este fin de semana «y se ha empezado a dar servicio desde la primera boya instalada», aseguraron ayer fuentes de la conselleria.
Los primeros campos que se han empezado a montar son los de s’Espalmador y de es Caló de s’Oli, en Formentera. Los motivos es que son los que registran una mayor demanda de peticiones para fondear desde hace semanas.
Hasta este año la gestión de estas zonas de fondeo regulado dependía de la conselleria balear de Medio Ambiente, pero ahora ha pasado a ser responsabilidad de la conselleria de Movilidad. Este proyecto nació hace dos décadas cuando fue aprobado en 2001 el Lifeposidonia, financiado por la Unión Europea y que permitió la creación de los citados campos de boyas llamados ecológicos.
La página de reservas inactiva
A la espera de tener activa la web de reservas de PortsIb, este servicio lo asume directamente el responsable del control de la instalación, sobre el terreno, y encargado del cumplimiento del tiempo asignado a cada embarcación para fondear.
La previsión es que la página de reservas de Portsib esté activa a mediados de esta semana. Pero la instalación de las boyas en los siete campos existentes las Balears y que en las Pitiusas son tres, no se terminará hasta finales de este semana.
Uno de los motivos de los retrasos a la hora de montar estos fondeos regulados ha sido la obtención de la autorización, de la Demarcación de Costas en Balears, para ocupar zonas de uso y dominio público litoral.
Los fondeos regulados
Dos de estos campos de boyas están en Formentera. El del islote de s’Espalmador es el más codiciado y cuenta con 51 boyas (cinco para barcos de menos de cinco metros y 46 para barcos de entre ocho y 15 metros de eslora).
El otro campo está en Es Caló de s’Oli, cerca de Punta Pedrera, una zona al resguardo de casi todos los vientos con una de pradera de posidonia calificada de «máxima protección», dentro del Parque Natural. En este campo se deben montar 26 boyas (siete para esloras de menos de ocho metros, 11 para barcos de entre ocho y 15 metros y ocho para aquellos cuyas esloras vayan de 25 a 35 metros de eslora. Es el único campo que admite barcos de más de 25 metros de eslora.
En Ibiza el campo de boyas se sitúa en ses Salines y su capacidad es de 39 amarres de las cuales nueve son para los barcos de menos de 8 metros de eslora y el resto entre esa medida y los 15 metros.
Actualmente la página correspondiente, de Portsib, para realizar las reservas no funciona. Los tripulantes se encuentran con una página informativa en la que se puede leer: «La reserva de boyas en estas instalaciones se realizará a través una web habilitada por PortsIb de funcionamiento similar a la página de reserva on-line de amarres en los puertos».
Añade que la futura página web se pondrá en marcha «cuando dispongamos de la correspondiente autorización de ocupación del Dominio Público Marítimo Terrestre, que se encuentra en tramitación y que esperamos disponer en breve». De hecho debió llegar la pasada semana.
