El Consell de Formentera, a través de los departamentos de Territorio, Medio Ambiente y Agricultura, remitió ayer al Govern balear un escrito de alegaciones contra la instalación del Parque Fotovoltaico Posidonia que proyecta la empresa Enerland en una finca agrícola de la Mola.

El pasado 21 de noviembre, la conselleria de Transición Energética del Govern publicó en el Butlletí Oficial de les Illes Balears (BOIB) el anuncio para la apertura del trámite de información pública sobre la solicitud de autorización administrativa, realizada por la empresa promotora, para «la declaración de utilidad pública y la evaluación de impacto ambiental ordinaria» del citado proyecto.

Dentro de plazo, el Consell presentó un escrito de alegaciones que incluye dos informes «vinculantes» y que son contrarios a esta instalación. Por parte del área de Territorio y del de Agricultura, se considera que el proyecto no se puede desarrollar «por no cumplir el proyecto con la legislación insular y balear vigente».

Plan especial

Plan especial

La Institución aclaró que está «a favor de la implantación de las energías renovables pero de manera planificada», y que con este fin trabaja en el desarrollo de un plan regulador de la implantación de instalaciones energéticas de Formentera, tal y como marca el Plan Territorial Insular (PTI).

El informe de los servicios técnicos de Agricultura señala que este parque solar «compromete el alto valor fértil y productivo de la finca y supondría una alteración de los sistemas de drenaje tradicionales, contraviniendo la Ley agraria de Balears de 3/2019, de 31 de enero».

La instalación se proyecta en una zona calificada como Área de interés agrario (AIA) y por lo tanto debe ser regulada y delimitada según establece el Consell en su PTI. En concreto, el proyecto se qproyecta en un terreno agrícola del camí de s'Estufador, con una superficie de 72.092 metros cuadrados, aunque el área de ocupación de las instalaciones fotovoltaicas es de 20.460 metros cuadrados, lo que representa un 28,3% de la superficie total. El proyecto está diseñado para producir 1,9 megavatios pico (kWp), que es la máxima potencia que genera un panel o conjunto de paneles en las horas de máxima insolación.

Mientras, el informe de Territorio recoge que el futuro plan especial de implantación de instalaciones energéticas determinará las tecnologías y los espacios más idóneos para desarrollar energías limpias. Si no fuera así, apunta el comunicado del Consell, «la implementación de energías renovables se realizaría de manera discrecional por parte de las empresas privadas, que decidirían las tecnologías y los espacios a utilizar», apunta la nota de prensa.

El Consell recuerda que «Formentera tiene un territorio muy limitado y protegido y tenemos que garantizar el equilibrio entre la instalación de energías renovables, el mantenimiento y la potenciación de las características del paisaje de la isla, que son parte de nuestra identidad y nuestra carta de visita».

Ahora será la conselleria balear de Transición Energética la que analizará todas las alegaciones presentadas, entre las que también hay de particulares, además de las del Consell de Formentera.

El presupuesto de ejecución de este proyecto impulsado por Enerland es de 1,5 millones de euros. En el mismo, la empresa señala que el propósito final de todas las instalaciones es «la producción de energía eléctrica a partir de la energía fotovoltaica que posee dicha zona, con el consiguiente ahorro de otras fuentes de energía no renovables».

Además ha logrado una subvención del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE) de fondos europeos Feder. En el caso de este proyecto, la ayuda asciende a 277.805 euros, según los datos de la conselleria de Transición Energética.