Encuesta del Banco de España

El 37% de las empresas dice que ha subido precios en el primer trimestre del año

El porcentaje de sociedades que admite tener dificultades para encontrar mano de obra sube al 44%

Lineales de aceite de oliva en un supermercado.

Lineales de aceite de oliva en un supermercado. / Europa Press

Rosa María Sánchez

Algo más de una de cada tres empresas (el 36,8%, casi el 37%) declara haber subido sus precios en el primer trimestre del año. Se trata de un porcentaje muy superior al del trimestre anterior (11,3 puntos por encima del 25,5% que resultó en el cuarto trimestre de 2023), según los datos de la Encuesta del Banco de España sobre Actividad Empresarial (EBAE) publicada este lunes en la que se interpreta que el repunte del primer trimestre puede tener que ver con "un efecto calendario", ya que en muchas actividades los ajustes de precios suelen concentrarse en los primeros meses del año. "Sin embargo, las perspectivas para el segundo trimestre apuntan a una ligera moderación de las subidas de precios", señala el Banco de España en su nota informativa.

Casi el 70% de las sociedades encuestadas entre el 5 y el 19 de febrero (la encuesta fue emitida a una muestra de 15.000 sociedades y se han recibido respuestas válidas de 6.500 de ellas) esperan un mantenimiento de las tensiones inflacionistas a un año vista. Los aumentos de la expectativa de costes se concentran, sobre todo, en el sector industrial, mientras que en el sector servicios las empresas esperan una cierta moderación.

En todo caso el 74,1% de la empresas encuestadas espera que este año se produzcan crecimientos de los costes laborales, unos 3 puntos porcentuales más que en el cuarto trimestre de 2023. Es creciente el porcentaje de empresas para las cuales la inflación prevista sería un mejor referente para la determinación de los salarios, en lugar de la inflación pasada.

También es creciente el peso de las sociedades que declaran tener dificultades para encontrar mano de obra. La existencia de problemas de disponibilidad de mano de obra es una percepción compartida por casi el 44% de las empresas; en concreto, por el 43,8%, eso es 1,2 puntos porcentuales más que hace tres meses. Por sectores de actividad -según el análisis del Banco de España-, los problemas siguen siendo especialmente pronunciados en la hostelería, la agricultura y la construcción, donde más del 50% de las empresas declaran estar viéndose afectadas. "Esta heterogeneidad sectorial es relevante a la hora de entender las diferencias en las expectativas de costes laborales a medio plazo, ya que las ramas en que se aprecia una mayor incidencia de estos problemas de mano de obra tienden a coincidir con las que esperan mayores aumentos de sus costes laborales", añade el organismo.

A la hora de identificar qué factores están condicionando la actividad empresarial en el primer trimestre del año, el Banco de España observa "una estabilización en la incidencia de la incertidumbre sobre la política económica, tras dos trimestres de fuerte repunte". En diciembre pasado, alrededor del 60% de las empresas declaraba que el aumento de la incertidumbre sobre la política económica está afectando negativamente a su actividad y que, de hecho, se había convertido, en el cuarto trimestre del año, en el principal factor condicionante de su negocio. Por segundo trimestre consecutivo, la encuesta registraba un aumento de la incertidumbre política como que lastra la actividad empresarial, después de haber tocado suelo en el segundo trimestre del año pasado, antes de la convocatoria de las elecciones generales del 23-J, cuando este factor era señalado como un lastre por el 46,6% de las empresas encuestadas.

Con el objetivo de evaluar las consecuencias económicas de las recientes tensiones geopolíticas en el mar Rojo, la encuesta empresarial ha incluido en esta ocasión una pregunta adicional sobre esta cuestión. En el conjunto de la muestra, un 25% de las sociedades declaran verse negativamente afectadas por esta perturbación, de las cuales más de la mitad apuntan al aumento del coste del transporte como la principal vía de impacto, mientras que un tercio señalan los retrasos en las entregas de mercancías. Por ramas, este impacto negativo está concentrado fundamentalmente en la industria y el comercio, donde casi un 45 % de las empresas se estarían viendo afectadas. Otras ramas, como la hostelería, la información y comunicación y las actividades inmobiliarias, muestran un menor grado de preocupación por las posibles consecuencias sobre su actividad de los ataques en el mar Rojo.