Primera noche del MWC: de la fiesta 'afterwork' con mil congresistas al restaurante en exclusiva para 16

Ni una jornada agotadora de recorrer moqueta en el enorme recinto de Fira Gran Via frenó las ansias de socializar y adentrarse en la noche de Barcelona tras la primera jornada del Mobile World Congress 2024. Tras la pandemia han desaparecido la mayoría de grandes fiestas corporativas organizadas por las principales empresas tecnológicas, dando lugar a mucha agitación nocturna en formato de pequeños grupos que reservan mesas en restaurantes y clubs de moda. Pero sí se mantienen algunas fiestas 'after work' para que los asistentes al congreso interactúen, así como eventos muy especiales y selectos. Las salas Sutton, Shôko y el restaurante Jacqueline's de la calle de Enric Granados, o el Velissima de la Nova Bocana dibujan algunos ejemplos destacados de lo que fue la primera noche y lo que se cuece esta semana en la capital catalana incluso a altas horas.

En Jacqueline's, uno de los espacios más en boga de la ciudad, al combinar cenas con música y copeo en una de las calles con más ambiente gastronómico, cerraron el local solo para un selectísimo grupo de clientes de la firma Huawei. Eran solo 16 personas, pero quisieron hacer suya la sala por una noche. Se distribuyeron en varias mesas montadas como en un banquete, con la minuta específica para esa noche, un menú y una selección de vinos sin reparar en gastos, para lo que era una cena de negocios, sin fiesta posterior.

Cerca, en Sutton hubo una super celebración 'afterwork' de las 9.00 horas a la medianoche. Se trató de la ya 8ª edición de la fiesta Mobile Disco Fever MWC24, que convocó AppsFlyer en colaboración con Moloco & data.ai, con Sutton y Cubick Events & Accommodation como local elegido y organizadores, respectivamente. Hubo 'show', bailarines y brindis, en un divertido reencuentro al que asistieron mil personas (el aforo se cerró al completarse) pese a que más de 2.300 se habían inscrito con el objetivo de asistir. Se mezclaron trabajadores y clientes de la compañía, y finalizada su fiesta la sala se abrió como 'disco' en una animada sesión hasta altas horas.

En Shôko, en el Front Marítim, se vivió una velada similar, con un gran cóctel-cena para una gran empresa tecnológica francesa hasta las 23.30, para que su personal y clientes interactuasen distendidamente. Algunos se quedaron a la sesión de 'disco' que comenzó después y que mezcló a clientes locales con muchos asistentes del congreso, que no se desanimaron por los madrugones que algunos afrontaban este martes. No faltaron las reservas en su privado y las botellas a lo grande.

También en primera línea de mar, el restaurante con copas y música Velissima colgó el lleno en todos sus espacios gracias a numerosos grupos de distintas empresas y también congresistas que reservaron cenas a título personal y disfrutaron de la animación musical de inspiración italiana que distingue al local.

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