La UD Ibiza no jugará este fin de semana partido oficial de Liga de Segunda B, después de que haya sido aplazado el encuentro que la escuadra ibicenca debía disputar este domingo frente al CD Alcoyano, a las 12 horas en el campo El Collao, feudo del equipo alicantino. El club de Alcoy había solicitado a la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) que el choque no se jugara debido al positivo por Covid-19 de uno de los futbolistas de su primer equipo, el centrocampista Juan Antonio Casanova.

Por este contagio, el plantel y el cuerpo técnico del CD Alcoyano que milita en la categoría de bronce se encuentran pasando la exigida cuarentena, motivo que se alegó para no jugar el choque.

Ayer por la mañana la entidad alicantina informó en su Twitter oficial de la resolución federativa del juez de competición, que acordó aplazar el encuentro y ya se busca «una nueva fecha lo más cercana en el tiempo que se determinará por este órgano tan pronto como se acrediten todas las circunstancias que permitan la disputa del mismo».

Posteriormente fue la entidad ibicenca la que informó del aplazamiento del partido, que es el segundo que no puede jugar el Alcoyano después de que también tuviera que aplazarse el Alcoyano - Hércules por una situación de Covid-19 en los herculanos.

En la UD Ibiza, líder del grupo 3-B, acatan la decisión que se ha tomado pero fuentes del club aseguraron ayer que el CD Alcoyano no ha cumplido con el protocolo establecido por la RFEF y el CSD y que el ente federativo tampoco ha intervenido al respecto.

La Balear empieza a repartir los test a los equipos de Segunda B y Tercera

La Federació de Futbol de les Illes Balears informó, a través de su página web, que ya ha empezado a repartir entre los clubes de Segunda B y Tercera de la comunidad los test para la detección del Covid-19 facilitados por la Real Federación Española de Fútbol. La obligatoriedad de pasar estas pruebas entra en vigor a partir del 14 de noviembre, según explicó en ente federativo autonómico.