Pablo Alfaro (entrenador de la UD Ibiza) y Raúl Casañ (técnico de la Peña Deportiva) ya cuentan los días para la disputa del play-off express, en el que sus equipos se medirán el próximo sábado al Cornellà y al Marbella, respectivamente. Lo harán a domicilio, en Andalucía, y sin público por la pandemia del Covid-19, pero con toda la ilusión del mundo para conseguir el objetivo soñado. Los de Vila comenzarán ante un Cornellà que «va a ser un rival duro y compacto», declaró Alfaro. Los de Santa Eulària, ante un Marbella contra el que deberán «competir a muerte», dijo Casañ.

Los dos preparadores, que ayer participaron en la recepción que el Consell brindó a sus clubs, ya huelen la competición después de haber estado apartados de ella tras el paro obligatorio de la Liga por la pandemia del Covid-19. Será un todo o nada para sus conjuntos, que tratarán de prolongar al máximo posible su estancia en Málaga. Por delante, tres eliminatorias si quieren alcanzar la gloria.

El técnico de la UD Ibiza reconoció que afrontarán un play-off atípico pero «lo importante» es que ellos son uno de los conjuntos participantes, igual que la Peña. «Tenemos la ilusión y las ganas de volver a competir, a sabiendas de que tenemos un objetivo muy bonito, que además es histórico. En ilusión y en ganas de poder hacerlo muy bien creo que estamos empatados nosotros y la Peña», añadió el aragonés.

Según Alfaro, la clave del éxito está en «competir lo mejor posible» pero también en «ser fiel» a lo que ha venido trabajando «cada uno» durante la temporada. «Hay que ser conscientes de que todo lo que nos hemos podido espiar unos a otros fue hace cuatro meses. Ahora vamos a ver cómo nos encontramos todos», indicó el exfutbolista profesional.

Alfaro recalcó que el Cornellà no les pondrá las cosas fáciles y puso en valor que los catalanes «ya llevan tres play-off. «Quizás puedan tener menos nombre mediático, pero va a ser un rival duro y compacto, que tiene sus armas y las sabe utilizar muy bien», sentenció.

Por su parte, Casañ manifestó que están viviendo «un sueño». «El año pasado ya hicimos una buena temporada y ahora nos vemos en un play-off, con una ilusión y unas ganas tremendas de llevar el nombre de Santa Eulària e Ibiza», subrayó el valenciano.

Para el entrenador peñista, «cualquier equipo» que les hubiera tocado habría sido «muy potente». Pero sus jugadores lo van a dar todo para llegar lo más lejos posible. «Cada día que pasa estamos disfrutando a tope cada entrenamiento para llegar allí y poder hacer algo grande».

La receta para tumbar al primer adversario será la seña de identidad de una Peña que tantas alegrías está dando: «No sabemos lo que nos vamos a encontrar, pero es muy importante salir desde el minuto uno a competir. Ante el Marbella hay que hacerlo a muerte, como en una final, que es lo que es», manifestó un Casañ que dijo tener «muchas esperanzas de hacerlo bien», prolongando así la buena imagen que han dado durante toda la campaña de Liga.

En la recepción de ayer también estuvieron Marc de Val y Cristian Cruz, jugadores de la Peña que, sin embargo no podrán disputar el primer partido frente al Marbella por sanción.

De Val dijo que el equipo tiene «una ilusión increíble» y recalcó que han «trabajado muy duro estas semanas» para llegar de la mejor forma posible a la liguilla.

Cruz afirmó que a pesar de no poder jugar el primer duelo va a vivir «un sueño», aunque reconoció que tiene «una espinita clavada» por no poder participar «posiblemente en el partido más importante» de sus vidas. «Pero estoy convencido de que el equipo no va a notar para nada nuestra ausencia», apuntó el jugador ibicenco.

Cruz, ambicioso

Cruz, ambicioso

El defensa también apuntó que, una vez aquí, no tienen nada que perder. «Vamos a por el ascenso, ni más ni menos. El equipo está preparado para ello y es lo que se va a exigir. No vamos allí de vacaciones, vamos a competir».

«Son tres finales y las puede ganar cualquiera. Todo se va a decidir por pequeños detalles», manifestó De Val.

Por parte de la UD Ibiza, el primero en hablar fue el atacante Sergio Cirio, que dijo que se han «preparado muy bien» y que afrontan el play-off «con muchas ganas».

Su compañero Miguel Núñez, por su parte, afirmó que el confinamiento «ha sido una situación extraña», pero todos los jugadores de la plantilla demostraron «una gran profesionalidad» para mantenerse en forma. Retomados los entrenamientos en grupo, han podido mejorar sus condiciones para afrontar «con todas las garantías el partido contra el Cornellà».

Gonzalo de la Fuente, defensa de la UD Ibiza, se mostró optimista y rotundo: «Nuestro objetivo es el ascenso. Creo que estamos preparados para ir a por ello, aunque luego, evidentemente, puede suceder cualquier cosa. Pero el objetivo está clarísimo».

Fran Grima manifestó que tiene «la espinita» clavada por no haber podido acabar la Liga primeros, y haberse jugado el ascenso en un partido, pero ya no deben lamentarse. «Hay que pensar en el Cornellà. Si lo hacemos más allá será un error», sentenció.