El palista del CN Sant Antoni Bruno García se quedó ayer a las puertas de alcanzar la final en K2 1.000 metros del Mundial sub-23 de piragüismo junto a su compañero de selección Adrián Muñoz, del Club Escuela Piragüismo Aranjuez de Madrid. La dupla española se desfondó en los últimos 200 metros de la segunda semifinal disputada en el lago de Szeged, en Hungría, y acabaron en la séptima posición, lejos de los puestos de clasificación para la final A del domingo.
García y Muñoz lograron el pase a semifinales gracias a un quinto puesto en la ronda preliminar, donde anotaron un tiempo de 3:28:29. Apenas cuatro horas después afrontaron la segunda de las semifinales. El palista ibicenco y su compañero arrancaron con fuerza y lideraron la prueba durante los primeros 100 metros. Luego fueron engullidos por las embarcaciones de Bulgaria, República Checa y Kazajstán, a la postre las tres primeras clasificadas para la gran final. Los españoles marchaban cuartos y albergaban opciones de clasificación, hasta los últimos 200 metros, donde acusaron el esfuerzo y acabaron séptimos con un registro de 3:22:45. García y Muñoz disputarán la final B, el sábado por la mañana, al eludir las dos últimas posiciones de su carrera.
