En el deporte no hay mejor bálsamo que las victorias. El CB Sant Antoni logró este domingo su cuarto triunfo en el grupo Este de la LEB Plata, derrotando a domicilio al Safir Fruits Alginet por 67-76. Los pitiusos volvieron a ser un equipo más reconocible y se olvidaron así del tropiezo de la anterior jornada frente al Bueno Arenas Albacete en Sa Pedrera. Supieron sufrir y trabajar para acabar doblegando a un rival muy correoso.
El primer cuarto del choque fue de lo más igualado, con un bloque ibicenco que fue de menos a más para acabar venciendo parcialmente por 19-21. Los valencianos entraron en la recta final dominando el marcador por 19-16, pero cinco puntos seguidos de Lucas Antúnez (con un triple y dos libres encestados) dejaron a los isleños con una ventaja de dos tras los diez minutos iniciales.
El Sant Antoni creció en el segundo episodio. Sus porcentajes de tiro exterior mejoraron y poco a poco empezaron a abrir brecha en el marcador. Jordi Grimau desató las hostilidades con una canasta de tres puntos que empezaba a anticipar por dónde iba a transitar el periodo. Con el paso de los minutos el bloque de Portmany se escapó de 13 puntos, a pesar de los intentos de hombres como Nicolau por sostener al Alginet, que se acercó hasta el 34-43. Sin embargo, Pau Carreño, con un triple para los sanantonienses, puso las cosas en su sitio (34-46). Con algo más de 10 segundos para acabar el cuarto, el técnico local pidió tiempo para preparar una jugada. Los valencianos encestaron de dos (36-46) y Carlos Flores, técnico del Sant Antoni, pidió tiempo. Preparó la jugada y la pizarra salió bien. Skuja, cruzó la pista y anotó para establecer el 36-48.
En el tercer cuarto, el conjunto de Portmany mantuvo una suculenta renta durante muchos minutos. Pero del 45-55 se pasó al 54-55 con un 9-0 del Alginet. Los valencianos pusieron intensidad y acierto, con un triple de Sergio Hernández y tres canastas de dos de Nicolau, Dalmau y Verdeguer. Skuja dio aire a los isleños con un libre anotado (54-56) y, después, una antideportiva pitada a los locales permitió al Sant Antoni sumar cuatro puntos (con un uno más uno de Thompkins y una canasta de dos de Slezas), para acabar el cuarto en 54-60.
El Sant Antoni supo sufrir en el último capítulo del encuentro, agarrarse a la pista y acabar venciendo (67-76) a un Alginet que, eso sí, vendió cara su derrota y que siempre puso en complicaciones a los baleares. El conjunto pitiuso continúa en la zona noble de la clasificación en la temporada de su debut.