Juan Carlos Carcedo, entrenador de la UD Ibiza, felicitó ayer a sus jugadores por la victoria lograda frente al Orihuela (2-0), triunfo que sirvió a los ibicencos para asegurarse el primer puesto del grupo 3-B en la primera fase. «Hay que darle valor a todo lo que está haciendo el equipo porque creo que no es sencillo. Ves los otros grupos y lo igualados que están sus partidos. Hoy nos ha costado y tiene su dificultad», comentó en rueda de prensa.
El técnico riojano manifestó que «no» se esperaba que el rival les presionase «tan arriba» porque el Orihuela suele ser un equipo que «repliega un poco más». «Hemos tenido quince o veinte minutos que nos ha costado, pero el gol de Ángel [Rodado] nos ha ayudado y hemos tenido un poquito más de pausa», comentó Carcedo, que resumió que habían «hecho un buen partido» y «merecido los tres puntos». «Es de valorar también que el equipo en dificultades sabe sufrir y luego imponerse», indico.
El preparador de los celestes no quiere pensar todavía en la segunda fase de la competición, para la que ya están clasificados. Su objetivo es intentar ganar los dos partidos que quedan de la primera fase para acumular el mayor número de «puntos posibles». «Cuando estemos en esa siguiente fase veremos los puntos que vamos sacando, pero siempre intentando dar regularidad al equipo, dándole la máxima importancia a cada partido sin pensar a largo plazo. Porque el cuento de la lechera no suele salir bien», apuntó también Carcedo.
El míster de la UD Ibiza reconoció que no pudo contar con Batanero porque tenía unas molestias, mientras que Castel sufrió durante el partido, en el que jugó unos minutos, «un pequeño esguince que no tiene importancia».
Además, recalcó que la titularidad de Ángel Rodado y de Sergio Cirio eran merecidas porque «se lo habían trabajado» y debían jugar el partido.
