El entrenador catalán Carlos Flores aseguró tras el encuentro que «siempre es bueno debutar con victoria» y se mostró «contento» por lo que considera un «cambio de dinámica» en la manera de trabajar y competir del equipo ibicenco. «Sobre todo a nivel de intensidad y de esfuerzo, que es algo básico en nuestra idea de juego», indicó el joven técnico, que pretende que su equipo sea «muy valiente en toda la pista», que realice «un baloncesto atractivo» para los aficionados y que sea «también ejemplo de los pequeños, cómo se tiene que defender a toda la pista, en el contraataque y en crear triples».
«En ese aspecto estoy contento por el cambio de idea, pero en el partido, a ratos. Creo que hemos sido capaces, también gracias a Martí Duch que ha salido muy bien en el triple, de tener momentos en el segundo cuarto y finales del primero brillantes, pero hay que ser más consistentes y mantenerlo más minutos», explicó sobre el partido, tras el que reflexionó que deben «mejorar mucho más en lo básico» a nivel defensivo. «Ser capaces de correr la pista rápido y de tirar alegre y divertido será un poco el sello que queremos imprimir», añadió.
Carlos Flores recordó que «hace falta asentar esos conceptos», pero admitió que la plantilla «es muy buena» y que el grupo «está muy unido», para lo que puso un claro ejemplo: «Dos compañeros que hoy han jugado menos estaban en el vestuario haciendo piña, y eso es lo más importante».
El catalán reconoció que el talento del equipo permite soñar con cotas superiores a la permanencia en la categoría nacional. «Esta es una plantilla de buen nivel, con opciones reales para jugar la fase de ascenso y subir de categoría, si somos capaces de no cometer tantos errores y ser un equipo más estable en lo que a pérdidas se refiere o a tiros fallados debajo del aro, tenemos opciones muy reales de subir», argumentó Flores, quien destacó la gran acogida que ha tenido en la isla por parte del club. «La isla es preciosa y estoy súper contento de cómo me están tratando, esperemos que dure», puntualizó.
