Si no recuerdo mal creo que últimamente en el Parlament sugirió Silvia Tur que se controlase el trasiego de barcas entre Ibiza y Formentera, sobre todo intentando evitar las salidas de más de un barco a la misma hora. Ya no solo por el impacto ecológico de éstas, sino también por el absurdo/reducido número de viajeros en éstas. Pero señores, les da lo mismo. Sábado día 5, llegas a la Savina a coger el barco de las 8.30 tras haber trabajado 12 horas y te encuentras que no hay barco. En cambio, a las 9 salen dos barcos a la misma hora con apenas 20 pasajeros contados entre las dos navieras.

Y así nos encontramos a diario los que hemos de ir a trabajar allí. Sin saber qué barcos ni qué horarios habrá, pues últimamente varía según les viene en gana (y no por el mal tiempo). Sin saber si podremos llegar a trabajar a nuestra hora, pues los barcos de primera hora los fines de semana y festivos los han eliminado, impidiéndonos llegar a trabajar a tiempo. Sin saber si puedes volver a casa al terminar de trabajar, ya que el barco de las 21 también lo han eliminado y si pierdes el de las 20.30 sólo te queda rezar por que haya uno a las 22, aunque llegues a casa al final casi rozando el toque de queda.

Pero eso sí, luego queremos profesionales que nos atiendan al llegar, en este caso al hospital de Formentera. Ardua tarea, con tanta traba se te quitan las ganas.