El grupo de acción local para el desarrollo rural y pesquero de las Pitiusas ha realizado un estudio para desmontar falsos mitos sobre la producción de energía fotovoltaica, como el elevado precio, enfocado a que las tres cooperativas agrarias de Ibiza y los dos mataderos de las Pitiusas puedan invertir en la colocación de placas fotovoltaicas en sus instalaciones para la producción de energías renovables.

La autora del estudio, la consultora Inés Alomar, ingeniera técnica industrial experta en tecnologías y comunicación de la sostenibilidad, ha destacado, en la rueda de prensa de presentación del estudio, que "en los últimos años han bajado mucho los precios" de esta tecnología. "Hemos descubierto el potencial de la energía fotovoltaica en el sector agrario de Ibiza", ha resaltado Alomar, al tiempo que ha señalado que las energías renovables arrastran "una historia bastante negativa con el famoso timo del sol a raíz de la ley aprobada en 2015 que prevé el cobro por la energía solar consumida en los edificios". En todo caso, la especialista ha señalado que en la actualidad aún no se aplica el controvertido impuesto.

"Por desconocimiento, este proyecto ha permitido ofrecer una visión imparcial sobre esta tecnología y una imagen de lo que supondría para estos centros acometer esta inversión", ha agregado. En concreto, los cinco centros (los mataderos de Ibiza y de Formentera, las cooperativas agrarias de Sant Antoni y Santa Eulària y Agroeivissa) tendrían que acometer una inversión total de 123.686 euros para la instalación de 70 kwp de energía solar fotovoltaica, lo que supondría una reducción del consumo eléctrico convencional en 119.468 kwh anuales (un 42% del consumo actual de las cinco instalaciones) y una reducción de 112,6 toneladas de emisiones de dióxido de carbono a la atmósfera.

En todo caso, dadas "las limitaciones" de la normativa actual, según ha recalcado Alomar, los centros podrán cubrir con energía solar el 37% de su consumo eléctrico. La diferencia (hasta el 42% de producción) se inyectaría a la red eléctrica sin ninguna contraprestación a cambio.

Para la instalación de placas fotovoltaicas, los mataderos, que son instalaciones públicas, y las cooperativas agrarias pueden optar a subvenciones que cubren entre el 40 y el 80% (en el caso de los mataderos) del coste de la inversión. Contando esta ayuda de la Administración, los centros pueden amortizar la inversión entre un periodo de tres años, en el mejor de los casos, o siete.

Alomar ha resaltado que, "lo mejor del estudio", ha sido que "todo el mundo se ha mostrado entusiasta" ante la posibilidad por instalar plantas fotovoltaicas. "Este es el gran éxito de este trabajo", ha añadido.

Precisamente, la técnica de la cooperativa agraria de Sant Antoni, Alicia Morales, ha asegurado que ahora "hay que hacer los números y estudiarlo", aunque ha indicado que en el año 2009 ya se planteó esta posibilidad, pero al salir lo del impuesto del sol se descartó. "Este estudio nos ha ido muy bien. Se han desmontando muchos mitos y ha abierto una posibilidad que habíamos descartado. Nos volvemos a plantear recuperar este proyecto y sacarlo adelante", ha dicho.