«Aunque no es fácil, las personas mayores tenemos que aprender a prevenir los delitos y los accidentes domésticos», dijo ayer Antoni Marí, presidente del Club de Mayores de Santa Eulària, donde el martes por la tarde el agente de la Guardia Civil de Ibiza Ferran Gandía, impartió una charlas sobre esta materia, dentro del Plan Mayor de Seguridad del Ministerio del Interior. «La charla nos pareció muy interesante, ya que nos dio consejos sobre cómo circular por la calle con seguridad, sobre todo en el caso de las mujeres, para evitar los tirones de bolso, o sobre cómo prevenir los robos cuando vamos al banco», recordó Marí ayer por la mañana.

«Los ladrones saben cómo hacer sus cosas y también se están dando casos de timos, que son asuntos serios y desagradables, y tenemos que aprender a evitarlos», dijo el presidente del club de mayores de la Villa del Río, que insistió en que los asistentes, unas 25 o 30 personas, quedaron «muy contentos» con los consejos del experto.

El agente, por su parte, explicó que «esta temporada, desde que acabó el verano, ya hemos realizado al menos cinco charlas en clubes de mayores, la última ayer en Santa Eulària y la anterior en Sant Josep». Gandía lleva más de cinco años impartiendo en Ibiza conferencias de este tipo, incluidas una serie charlas y ponencias en institutos y colegios de la isla sobre violencia doméstica, violencia de género juvenil y de organizaciones peligrosas y acerca de actitudes violentas en internet. Gandía, responsable de coordinar y llevar a cabo el Plan Mayor de Seguridad en Ibiza y Formentera, advirtió de que «cada vez son más comunes las estafas a los mayores a manos de organizaciones y bandas».

El martes, en Santa Eulària, Gandía ofreció a las personas presentes en el club de mayores una serie de recomendaciones para la prevención de estas estafas, que son las más comunes. Lo primero, señaló Gandía, es asegurarse bien de que las personas que llegan a casa forman parte de la empresa a la que dicen representar, para lo cual es necesario cerciorarse con una llamada telefónica si surge alguna duda, así como comprobar el correo por si ha llegado alguna notificación y observar bien quiénes acuden a la vivienda y con qué vehículo se presentan.

Pedir ayuda a la familia

«También recomiendo a las personas mayores que llamen y pidan la opinión de un familiar o vecino de confianza que pueda ayudarles, con el fin de evitar ser víctimas de un timo», manifestó Gandía. «Si bien es cierto que en la isla no se han recibido muchas denuncias, también lo es que muchos de los que participan en las charlas conocen de oídas algunas de estas estafas de vanguardia, como son el timo del mantenimiento, la empresa de venta de productos y la revisión de las instalaciones», apuntó el agente.

Uno de las formas de reconocer cuándo se trata de una estafa, indicó Gandía, sobre todo en las que se cometen en domicilios, es que casi siempre se solicita dinero en mano por el servicio, ya sea como anticipo de la domiciliación o por una revisión o mantenimiento. «Esto les tiene que servir a las personas mayores para sospechar que la cosa no va bien, que puede tratarse de una estafa», relató el guardia civil.