Las obras de sustitución del emisario de Talamanca han comenzado su segunda fase, que consiste en la perforación del lecho marino por donde debe discurrir la nueva canalización, ha explicado el conseller de Medio Ambiente, Vicenç Vidal, que hoy ha visitado las obras junto al alcalde de Vila, Rafa Ruiz, y el conseller ibicenco de Medio Ambiente, Miquel Vericad.

Es la fase submarina de las obras y consiste en la perforación, con la ayuda de una guía, de un hueco de 1,20 metros de anchura en el lecho marino, donde se instalará la canalización de 800 centímetros.

El nuevo emisario contará con una longitud de dos kilómetros: uno de ellos discurre por las calles de la zona de Illa Plana, mientras que el otro corresponde a la parte marina.

En este último caso, la mitad de este trazado transcurre de manera subterránea, a unos 20 metros de profundidad, mientras que la otra mitad discurre sobre el lecho marino, con anclajes.

Esta segunda fase de perforación, en la que se trabaja las 24 horas del día, tiene un plazo de ejecución de un mes. La siguiente fase será la ejecución del tramo terrestre, para la que el conseller balear ha pedido "paciencia" a los vecinos por las molestias que podrán ocasionar estas obras.

Vidal ha destacado que las obras transcurren según las previsiones iniciales por lo que se confía que la nueva canalización esté lista antes de la próxima temporada turística.

Las obras de sustitución del emisario, que ejecuta Tragsa, han recibido la consideración de emergencia para evitar un peligro grave para el medio ambiente y la salud pública, lo cual ha permitido utilizar este mecanismo legal para ahorrarse un periodo de tramitación que podría haberse prolongado durante ocho o diez años.

El nuevo emisario tendrá una longitud de 2.026 metros, de los que 1.069 discurrirán por tierra y el resto por el fondo marino y soportará el doble de caudal que el actual emisario en previsión a la construcción de la nueva depuradora de Ibiza.