El Plan de Lucha contra la precariedad laboral que ha puesto en marcha el Govern balear para este año contempla un total de 320 actuaciones en Ibiza y otras 80 en Formentera. Esta campaña se iniciará el 1 de julio y se prolongará hasta finales de agosto.

La intención del Ejecutivo regional, explicada ayer en Palma por su presidenta, Francina Armengol, es que durante ese periodo trabajen en Ibiza ocho inspectores y otros dos en Formentera.

Esta nueva campaña extraordinaria de inspecciones contra el fraude laboral implicará en el conjunto de la Comunitat la llegada de 32 inspectores y subinspectores y un trabajador de apoyo, que se encargarán de desarrollar 1.300 controles, de los que más de 650 se darán en Mallorca.

Tres son los objetivos básicos que van a justificar semejante movilización de personal de la Inspección de Trabajo: la transformación en indefinidos de los contratos que son temporales sin una justificación real, la conversión en empleos a jornada completa de los falsos tiempos parciales, y la detección de prolongaciones del tiempo de trabajo que no se cotizan.

Más actuaciones que en 2015

En esta materia, se recuerda que además de la vigilancia que van a imponer durante los dos meses ´punta´ de la temporada turística los refuerzos llegados desde otras comunidades autónomas, el personal estable de la Inspección en Balears también va a desarrollar este año más actuaciones en relación a los citados objetivos que las fijadas para 2015 (se han previsto 1.786 controles para 2016), y además concentradas durante la temporada alta.

Un aspecto a destacar es que éste va a ser el segundo verano en el que se va a desarrollar esta campaña de inspecciones, con la salvedad de que en 2015 se ejecutó durante la segunda quincena de agosto y septiembre, lo que supone que la del presente ejercicio no solo va a ser 15 días más larga, sino que además se va a desarrollar durante las fechas con mayor actividad económica en el archipiélago y, consecuentemente, cuando mayor volumen de contratación irregular se registra.