La mayor parte de los 370 taxis estacionales que aprobaron poner en marcha los cinco municipios de Ibiza todavía no están circulando. A pesar de que ayer era la fecha fijada para que entraran en servicio, únicamente los 19 de Santa Eulària (del total de 38 para este verano, ya que se dividen en dos grupos), según un portavoz municipal, están ya prestando servicio.
En el resto de municipios, ya sea por problemas en los sorteos de los turnos, como es el caso de Sant Antoni, por retrasos en la Dirección general de Tráfico o en la Inspección Técnica de Vehículos (ITV), lo cierto es que la mayor parte de los asalariados no han podido empezar a trabajar.
A todos estos problemas se añade uno doméstico: deben llegar todos los aparatos de GPS (localización por satélite) que utilizan para organizar el servicio, y después un taller debe proceder a su instalación. «Están desbordados», explicaba ayer a este diario un taxista en relación a los talleres de la isla.
Pero incluso cuando el asalariado ya sabe que le ha tocado el primer turno, ha pasado la ITV y el trámite de Tráfico y tiene instalado su GPS en el coche, debe volver a la central de los taxistas de Vila (situada en ses Figueretes) para tramitar el alta en la empresa que los suministra y controla.
Con todos estos problemas no extraña que por ejemplo en Sant Josep esperen los taxis estacionales (104 en dos turnos) dentro de dos semanas, aproximadamente. Su segunda teniente de alcalde y coordinadora del área de Administración, Contratación y Policía Local, Paquita Ribas, reconoce que la tramitación no ha sido todo lo rápida que se esperaba. Y apunta además que este mes de mayo ha habido, como el año pasado, más actividad turística de la esperada, por lo que no considera descabellada la idea de adelantar el plan de las estacionales al inicio de ese mes e incluso prorrogarlo hasta octubre. «Cuando acabe la temporada deberemos analizar los resultados y tomar decisiones», apuntó la concejala.
De dos a cuatro meses
Ribas recordó que no hace tanto tiempo las estacionales se daban por dos meses. «Ahora son cuatro y habrá que estudiar, como acordamos con el Consell, la posibilidad de ampliar el plazo a seis meses. A este paso deberemos plantearnos cuántas licencias fijas deberemos dar», añadió.
En Sant Antoni, un problema en el sorteo (nueve asalariados aseguraron llevar el tiempo mínimo requerido en el servicio, cuando no era cierto), impidió publicar las listas hasta ayer tarde y aún no hay taxis temporales en las calles.
En Vila, desde el Consistorio explicaron que desde ayer mismo «la mitad de los 139» estacionales (una división complicada), ya están trabajando, aunque varios taxistas aseguraron que «como mucho media docena» han podido cumplimentar todos los trámites a tiempo para salir a la carretera.
En Sant Joan, donde se han concedido ocho estacionales (una menos de las previstas), se incorporarán «en un par de días», aseguraron desde el Ayuntamiento. Los turnos se repartirán entre los propios taxistas, indicaron.
Por su parte, Alejandro Cardell, presidente de la Federación Insular del taxi y de la Asociación de Taxis de la ciudad de Ibiza, calificó el proceso en todos los ayuntamientos de «auténtica chapuza». «Es el año en que peor lo han hecho», criticó el portavoz de los taxistas sobre el proceso.
