Los barrios de Can Fita y sa Carroca de Sant Jordi contarán en otoño de este año con un nuevo centro social para sus vecinos en su solar ubicado en la esquina de las calles Pica-Soques y Puig des Damians.
Las obras comenzaron ayer con el acto simbólico de colocación de la primera piedra por parte de la alcaldesa de Sant Josep, Neus Marí, acompañada por el presidente del Consell, Vicent Serra, que enterraron ejemplares de la prensa del día, monedas en curso y una copia del contrato de la obra, que ejecuta la constructora Tecopsa.
El arquitecto, Marc Tur, explicó a los vecinos y a las autoridades presentes los detalles del proyecto del centro social, que contará con 260 metros cuadrados, dos salas diáfanas para diferentes actividades además de unas pequeñas oficinas, un salón de reuniones y una zona exterior amplia con patios vallados que ha respetado los tres algarrobos que estaban en la finca, que hasta ahora era un parque abandonado.
«Este local es una demanda de los vecinos desde hace mucho tiempo», aseguró la alcaldesa, que subrayó que «es importante» que haya un espacio en el que los vecinos «puedan desarrollar sus actividades». Así, este centro social dará servicio a una zona de Sant Jordi «que necesita una atención especial porque está un poco separada de lo que es el núcleo principal del pueblo».
La inversión municipal ronda los 400.000 euros y el plazo de ejecución de las obras es de ocho meses, aunque la alcaldesa aseguró ayer que la constructora tiene previsto acortar los plazos y terminarla a finales de verano.
El Ayuntamiento de Sant Josep sacó a licitación la construcción de este centro por un importe de 572.554 euros, aunque finalmente el precio se ha rebajado notablemente, hasta los 398.245 euros.
Más población
Neus Marí remarcó que tanto el barrio de Can Fita como el de sa Carroca han crecido mucho en la última década y necesitaban, de manera urgente, una dotación de este tipo. «También era importante tener este local para que el Ayuntamiento cuente con una infraestructura en la zona cuando quiera hacer una actividad concreta», añadió Marí.
El diseño del centro se realizó a partir de las aportaciones de las asociaciones de vecinos, como ha sucedido con el centro de mayores de Cala de Bou, inaugurado hace pocas semanas.
En el centro convivirán las dos asociaciones de vecinos de la zona y está previsto que se impartan cursos y talleres durante todo el año.
