El pleno del Parlament aprobó ayer por unanimidad la proposición presentada por el PSOE para instar al Gobierno de Mariano Rajoy a cambiar la Ley del Sector de Hidrocarburos de 1998, con el fin de «prohibir todos aquellos proyectos de investigación, exploración, prospección o explotación de hidrocarburos en el mar que puedan afectar a espacios protegidos o zonas especialmente turísticas». El PP ya había anunciado el lunes que apoyaría esta propuesta y también voto a favor de las enmiendas de Més para que se adopten iniciativas ante la UE.

Aunque no es habitual que los populares y la oposición lleguen a acuerdos, en esta ocasión lograron sacar adelante esta iniciativa con el fin de que no se hagan exploraciones para buscar petróleo o gas en aguas próximas a Balears, tampoco su extracción, por el peligro que supondría para la economía de las islas, basada en el turismo.

El diputado socialista Joan Boned advirtió de que las prospecciones petrolíferas «ponen en peligro la continuidad de la principal industria» de Balears, el sector turístico, «sin olvidar las negativas consecuencias» sobre la actividad pesquera.

Con esta iniciativa el Parlamento regional también «constata» la necesidad de establecer límites a la libre iniciativa empresarial del sector de hidrocarburos que regula la actual ley en esta materia.

El representante socialista defendió que este tipo de actuaciones por parte de empresas privadas son una «amenaza» para la economía de las islas y su medio ambiente, que debe «preservarse», exigió Boned, quien además insitió en que la libertad empresarial debe tener «restricciones».

Antes, David Abril, de Més, había desvelado que el Gobierno de Rajoy cambió en octubre del pasado año la Ley de Hidrocarburos para añadir un punto favorable a las prospecciones petrolíferas, utilizando la vía de una disposición final a la Ley para la garantía del suministro e incremento de la competencia en los sistemas eléctricos insulares y extrapeninsulares.

Enfrentamientos PP y PSOE

El acuerdo de ayer no impidió, sin embargo, que se produjeran enfrentamientos y cruces de acusaciones entre el PP y la oposición. El socialista Joan Boned intentó, en su primera intervención en defensa de la propuesta centrarse en la importancia de esta unión para paralizar los proyectos previstos en aguas de Balears, a la vez que recordó la postura favorable del ministro José Manuel Soria. Sin embargo, Jerez, que propuso una «resistencia activa» ante la intención de las compañías privadas de buscar petróleo o gas en el mar próximo a Balears, centró su intervención en la defensa de los aspectos positivos de la Ley de Hidrocarburos, en la falta de oposición por parte del PSOE balear en la pasada legislatura cuando los proyectos de prospecciones comenzaron a avanzar y en afirmar que, en cambio, el PP balear siempre se ha pronunciado en contra, con una primera iniciativa parlamentaria en 2011.

Boned replicó que el expresident socialista Francesc Antich «reconoció» que se equivocó y criticó que, desde 2011, el PP «no dijo nada y son incapaces de rectificar». Añadió que en 2011 los populares presentaron la propuesta porque en Madrid gobernaba el socialista José Luis Rodríguez Zapatero y en Balears, Antich, pero recordó al PP que la propuesta aprobada ayer llegará al Congreso de los diputados. «Entonces veremos qué pasa y si sus diputados de Balears en el Congreso siguen buscando excusas y votando contra Balears», dijo Boned al PP.

Por su parte, desde Més, su diputado David Abril ha dicho que «esta batalla va para largo» y que «de Madrid -del Gobierno- no se puede fiar, comenzando por el ministro» de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria.