La situación de la sanidad pública en Ibiza se ajusta al título de este escrito: con la actual consellera de Salud y un Govern empeñados en dar la espalda a los problemas de los ibicencos, nuestro sistema sanitario se encuentra en un túnel sin salida. Un túnel en el que se acumulan los problemas y la falta de soluciones, en el que los gestores, desde Mallorca, mueven a su antojo las fichas de un tablero en el que Ibiza, está perdiendo una partida tras otra.

Motivos de indignación hay sobrados, como la eliminación de la acreditación de Hospital a Cas Serres, que en Ibiza tenemos las listas de espera quirúrgicas más elevadas de Baleares, saturación en Urgencias, falta de personal? y a todo ello ahora hay que sumarle una nueva vuelta de tuerca (por culpa del servilismo demostrado por los gobiernos de izquierda en Ibiza que dan la callada por respuesta a todas las agresiones que estamos sufriendo por parte de Mallorca): la promesa incumplida de la implantación del Servicio de Alergología en los hospitales públicos de las islas. El pasado mes de diciembre se aprobó una enmienda del PP a los presupuestos de la Comunidad por valor de 500.000 euros para la implantación de este servicio en la sanidad pública de Baleares. Pero en el pleno del Parlament de les Illes Balears de la pasada semana, conocimos por voz de la consellera de Salud, Patricia Gómez, que ningún hospital de las islas contará con este servicio, y que el alergólogo contratado en Son Espases actuará solo de forma 'consultiva'. Para avivar más su cinismo, añadió que los pacientes alérgicos serán tratados por otros departamentos y si fuera necesario «se enviarían a servicios de Alergología de la Península». Una nueva muestra del desconocimiento de la señora Gómez de la realidad sanitaria de nuestra isla, así como de su incompetencia para manejarla.

La señora Gómez sigue ignorando el Real Decreto 1030/2006 que dice que las Comunidades Autónomas deben tener la misma cartera de servicios sanitarios, y también demuestra desconocer la recomendación de la Organización Mundial de la Salud por la que insta a que haya un alergólogo por cada 50.000 habitantes. Pero lo más grave es el desprecio que está demostrando a los más de 250.000 pacientes alérgicos de Baleares, condenándoles, en caso de precisar de un alergólogo, a acudir a la sanidad privada donde sí existen recursos.

Los alérgicos se incrementan aproximadamente en un 2% cada año y Baleares sigue siendo la única Comunidad en España sin servicio de alergología en la Sanidad pública.

Desde la Comisión de Sanidad del Partido Popular de Eivissa llevamos tiempo dando batalla por la implantación de este servicio y lamentamos profundamente que se desatiendan con tanto desprecio las demandas de la sociedad. La señora Gómez está sumando en Ibiza capítulos a su desastrosa gestión. Su credibilidad es nula; su compromiso con los pacientes en la isla, inexistente; su voluntad por solucionar los problemas que ellos mismos generan, brilla por su ausencia?

Y así, avanza el suma y sigue de la izquierda en gestión sanitaria: los que se han llenado la boca diciendo que han devuelto los derechos a los pacientes de las islas, son precisamente los que más están empujando a estos pacientes a hacerse un seguro médico privado. Y esto, es sólo la punta del iceberg.