­El alcalde, Vicent Marí, advirtió de que la conselleria suministrará agua desalada desde el depósito de Can Guasch a la zona de Roca Llisa y Santa Eulària utilizando unas tuberías que tienen «50 años». También criticó que se haya tardado «seis meses» en redactar un proyecto que Santa Eulària habría autorizado «incluso con una mera declaración responsable».

El PSOE preguntó por qué se ha tardado un mes en dar la licencia, a lo que Marí contestó que este es un plazo «normal» y añadió que se autorizaron las obras para que no les acusaran «de poner obstáculos». De todos modos, apuntó que el Consistorio ya está preparando un proyecto para renovar las canalizaciones incluidas en la interconexión, que se financiará con los PIOS del Consell. También se modificará el trazado para que la conducción transite por suelo público y no terrenos privados, como ocurre ahora.

La directora general de Recursos Hídricos, Joana Garau, matizó que se ha optado por utilizar esta conducción para llevar cuanto antes agua de calidad «a la zona del municipio que más la necesita», aunque recalcó que al tratarse de la red municipal, corresponde al Ayuntamiento asegurar que esta no sufra fugas.

Por otra parte, Marí aseguró que los datos de los pozos municipales de Jesús no «son tan alarmantes» como los divulgados por el Govern, sino que las reservas han aumentado ligeramente respecto al año pasado. De todos modos, informó de que se ha hecho llegar a la Agencia Balear del Agua una oferta para la adquisición de metros cúbicos para suministrar a Puig d´en Valls -y a Jesús a través de esta población- y también a Santa Gertrudis. A pesar de que estos núcleos podrían recibir agua de la interconexión de las desaladoras, la conselleria «aún no ha contestado» a esta petición.