La Autoridad Portuaria de Balears (APB) se mostró ayer más que receptiva a la propuesta del presidente del Consell de Formentera, Jaume Ferrer, para crear una línea de «amarres sociales» en el puerto de la Savina, pensados para los residentes, ya que «coincide» con su objetivo. Aunque el organismo portuario no es partidario de utilizar ese término, prefiere denominar este tipo de servicio como amarres a un «precio razonable», señaló que coincide con la idea del Consell aunque no precisó si eso puede depender del final de la concesión del puertos deportivo de Formentera Mar que concluye el 24 de junio de 2018.
Fuentes del organismo portuario señalaron que al igual que existe esa posibilidad en el resto de puertos bajo su gestión «tiene que haber una opción [en la Savina] para un perfil de usuario que tenga pequeñas embarcaciones» y que no pueda pagar los precios que piden actualmente las empresas que gestionan los puertos deportivos. Al mismo tiempo, la APB consideró que los puertos del Estado «nunca podrán dar salida a la demanda» relacionada con este tipo de usuarios que generalmente cuenta con pequeñas embarcaciones que usa para recreo, y por tradición y cultura. Las mismas fuentes reiteraron la disposición de la APB a «estudiar como podemos desarrollar esto».
Un club náutico sin amarres
Un club náutico sin amarres
El presidente del Club Náutico de Formentera, Vicent Tur, recordó que desde siempre «el pueblo de Formentera ha reivindicado un acceso al mar, sin mojarse los pies como hasta ahora», a no ser que el usuario tenga los suficientes recursos como para pagarse un amarre en los puertos más caros del Mediterráneo. Insistió en que esta posibilidad no existe en la Savina para la que defiende una gestión «sin ánimo de lucro».
Tur aseguró que el Club Náutico está activo pero carece de medios. «Así como hay un campo de fútbol o un polideportivo, ahora a los que nos gusta navegar no tenemos servicio al mar». Por ese motivo calificó de «buena idea» la propuesta del Consell, «se aplique donde se aplique, se trata de que nos den un sitio», concluyó.
