Una vez más las encuestas no han dado una, para alegría del PSOE y el PP y para desconcierto de Podemos y sus socios. El PP ha mejorado sus resultados del 20-D en las Pitiuses y en Balears, y ha sido la fuerza más votada en todos los municipios (también en Formentera), mientras Podemos se mantiene en segundo lugar y los socialistas se resignan a un tercer puesto que aún no han asimilado (solo en Sant Antoni superan a los de Pablo Iglesias). No obstante, los funestos vaticinios con sorpasso de Podemos incluido no se cumplieron ni de lejos, lo que desató la euforia en la sede del PSOE: la ibicenca Sofía Hernanz mantendrá su escaño como diputada, lo que no es moco de pavo, pues algunas encuestas lo daban por perdido.

El popular Santi Marí ha superado notablemente sus flojos resultados de diciembre (fue el senador popular elegido con un menor porcentaje de votos): ha sumado 19.316 votos (el 35,8%), unos 3.000 más que el 20-D, y ha sacado 6.550 papeletas al candidato de Unidos-Podemos-Más, Mario Devis, que repite resultado (23%). También el veterano Toni Costa iguala los votos que obtuvo su predecesor, Simón Planells, en los anteriores comicios y se sitúa a solo unos centenares de papeletas de Devis. Muchos en el propio PSOE habrían firmado con los ojos cerrados este resultado.

2.500 votos más para el PP

En el Congreso, el PP ha logrado en estos seis meses de incertidumbre pasar del 29,5% de los votos al 34,6%, 2.500 votos más, a gran distancia de Podemos, que calca su resultado del 20-D (24,8% de los sufragios, con 13.919). El PSOE consigue el 21,6% y 12.125 votos, una cifra similar a la de diciembre. Ciudadanos sigue clavado en el 14%. Solo el PP se libra del día de la marmota.

El PP ha recuperado más de 20.000 votos en Balears (pasa del 29% al 35%), aunque el reparto de escaños no varía: mantiene los tres que obtuvo en diciembre, mientras que el PSOE conserva los dos, al igual que Podemos, y Ciudadanos el que logró. Tampoco cambian los resultados en el Senado: el PP tiene cuatro escaños (dos de Mallorca, uno de Menorca y el pitiuso) y Podemos uno.

Por islas, el PP ha conseguido el 35% de los votos al Congreso en Ibiza (2.300 más que en diciembre) y el 32% en Formentera (cinco puntos más). Podemos y sus socios obtienen el 24,7% de los votos en Ibiza y el 30% en Formentera. El PSOE se queda con el 21% en ambas islas, similar al resultado de diciembre.

Tal y como se esperaba debido al hastío generalizado tras la repetición de las elecciones, la abstención fue una de las más altas de la democracia, del 42%, aunque no superó el récord de 2011, cuando se alcanzó el 43%.

De nuevo se demuestra que la única encuesta que vale es la de las urnas: los de Podemos se disponían a celebrar un fiestorro pero acabaron en un funeral; justo al contrario de lo que les ocurrió a los socialistas y los populares. La alegría siempre va por barrios.